Casi el 6% del gasto del Ayuntamiento en 2016 se enfrentó al reparo del interventor general municipal por anomalías en la tramitación de esos pagos. Son 237 facturas con un importe total de 13,84 millones de euros que el Ayuntamiento pagó después de que el alcalde, Xulio Ferreiro, decretara el levantamiento de la suspensión dictaminada por el funcionario encargado de fiscalizar la gestión municipal. Idéntico camino siguieron 115 facturas por 766.985 euros del Instituto Municipal Coruña Espectáculos, el 14,14% de su gasto, como había denunciado el BNG en junio.

El pleno municipal tomará conocimiento el próximo lunes, sin votación y en principio sin debate, del dictamen de Intervención y del informe de Alcaldía en el que se justifica el pago. Las facturas emitidas por el Ayuntamiento oscilan entre los 478,5 euros por el pago de alimentos para los animales del Acuario el 15 de enero y los 327.416 por la adecuación de los vestuarios en la planta baja del Coliseum. Las del IMCE van de los 91,96 euros de la asistencia al público en un concierto a los 60.500 del alquiler de equipos de sonido, luz y vídeo para los conciertos del Noroeste Pop Rock.

La continuación de los servicios de jardines y de suministro eléctrico una vez agotados los contratos y sin que mediara nueva adjudicación suponen 73 de cada 100 euros abonados en facturas irregulares según Intervención. Otro 7,5% corresponde a gastos asociados a la celebración de la Copa del Rey de baloncesto en el Coliseum en febrero de 2016, firmada por el anterior Gobierno local, del Partido Popular. Un 17% también se debe "en su inmensa mayoría", según alega el alcalde en su informe, a contratos extinguidos que continúan prestándose sin nueva licitación por ser "necesarios para el funcionamiento de los servicios públicos".

La Alcaldía justifica su decisión de levantar los reparos por la exigencia legal de que el Ayuntamiento pague a sus proveedores, "sin distinguir entre las obligaciones de conformidad con la normativa y las que se contraen al margen de estos procedimientos". Ferreiro alega también que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha fallado que "está justificado por razones de interés público" mantener en vigor un "contrato nulo", "con carácter excepcional y en espera de la adopción de medidas urgentes". Intervención advierte año tras año a los diferentes gobiernos locales de la necesidad de agilizar la licitación de servicios para evitar la continuidad irregular de un contrato finalizado.

El alcalde defiende en su informe que en todas las facturas con reparo los responsables de las áreas municipales acreditaron que los servicios se habían prestado, que el precio estaba justificado y que, de no abonarse, el Ayuntamiento incurriría en un "enriquecimiento injusto" y se enfrentaría a un importe mayor en el futuro por la suma de los intereses legales. "Los responsables de los departamentos no apreciaron responsabilidades -expone Ferreiro-. Por parte de la Alcaldía no se tuvo conocimiento de denuncias ni reclamaciones de terceros". Según declaró Ferreiro ayer a periodistas, todos los pagos "están justificadísimos; si no, no se harían".

Toda la facturación de jardines en 2016 fue motivo de reparo del interventor. En diciembre de 2015, el Ayuntamiento suspendió la nueva adjudicación para evaluar su viabilidad económica. Tras recibir varios informes, desistió de la adjudicación en octubre, pero el recurso de la empresa mejor valorada ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales prosperó y el Ayuntamiento se vio obligado a adjudicarle la licitación este enero.

En el caso de las facturas por el suministro de electricidad cuestionadas por Intervención, el Gobierno local alega que su tramitación se debió, fundamentalmente, al retraso en la formalización del nuevo contrato y a la existencia "desde hace décadas" de cuadros "a tanto alzado, sin contrato".

La Copa del Rey generó un gasto próximo al millón de euros con reparo de Intervención que obedecía a compromisos adquiridos por el anterior Gobierno local, alega el actual, "que había que atender para evitar un serio perjuicio para la imagen de la ciudad y para la hacienda municipal".

El resto de los reparos levantados por el alcalde son atribuidos por Ferreiro al "problema endémico" y "estructural" de la continuación de servicios cuyo contrato se mantiene, pese a haberse extinguido, por no entrar en vigor uno nuevo. "Las causas son variadas -alega el alcalde en su informe- desde la presentación de recursos por los licitadores que suspenden la adjudicación a problemas en los pliegos y atrasos en la tramitación de la adjudicación".