El delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, subrayó ayer, en la conmemoración del 39 aniversario de la Constitución española en A Coruña, que no se puede "tolerar" que una minoría intente imponer su criterio al margen de la ley "ni la burla a una democracia por la que tanto luchamos".

Las instituciones públicas que emanan del texto constitucional, solo deben servir al propósito de "garantizar a todos los españoles la convivencia pacífica en un marco de legalidad", según aseveró Villanueva durante su intervención, en referencia al "reto independentista ilegal" en Cataluña. El delegado presidió en la ciudad el acto oficial de conmemoración del aniversario de la Constitución acompañado del vicepresidente de la Xunta, el general jefe de la XV zona de la Guardia Civil, el jefe superior de Policía de Galicia, y el presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, entre otras autoridades civiles y militares.

En su discurso, el delegado del Gobierno indicó que en este año "convulso", y pese al paso del tiempo, la Carta Magna "se mantiene vigente, eleva a fundamental la defensa de la justicia, la seguridad y libertad, y es la base de la convivencia", por lo que advirtió que "hoy más que nunca" es necesario reafirmar el "inquebrantable" compromiso con el Estado, la democracia y la Constitución.

En alusión a la crisis en Cataluña, Villanueva aseguró que lo vivido en estas últimas fechas ha sido una "situación extraordinariamente grave" que ha requerido medidas "sin precedentes", señaló en referencia a la aplicación del artículo 155. "El reto independentista ilegal y contrario al Estado de derecho exigió esa respuesta firme y clara", apuntó el delegado, quien añadió: "Lo sucedido pone de relieve que la Constitución sigue viva, que se hizo con un sentido de presente y de futuro".

Tras apelar a la colaboración de todos para el fortalecimiento de las instituciones y una convivencia en paz, Villanueva explicó que "si no acatamos y respetamos las reglas no podemos hablar de democracia real". Por ello sostuvo que no se puede perder el espíritu con el que se abordó la Constitución en 1978. "Nuestro objetivo tiene que seguir siendo derribar muros, no construirlos. Buscar lo que nos une, no lo que nos separa, y obtener acuerdos estables, duraderos, que nos permitan avanzar y crecer en conjunto", afirmó el delegado del Gobierno en Galicia, partidario de ver las particularidades de los territorios como "un elemento de riqueza y no de confrontación".

Después de destacar el trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad, a los que agradeció su labor también en "extraordinarias situaciones que se han vivido en las últimas semanas", Villanueva finalizó su discurso con una "regla de oro inviolable en toda negociación: no pedir lo que no se puede entregar; respetándola, todo es posible". Los himnos de Galicia y de España sonaron al terminar el acto.