Abanca celebró ayer la apertura de su nueva oficina de referencia, en la plaza de Lugo, con tecnología de vanguardia y asistencia personal pensada para una atención "amigable" al cliente lejos de la tradicional caja. La inauguración de esta nueva sucursal contó con la presencia del consejero delegado de la entidad bancaria, Franciso Botas Ratera.

La oficina de Payo Gómez -que se ha desarrollado en un espacio abierto sin barreras arquitectónicas y que cuenta con un robot de asistencia- abrirá durante tres semanas por las tardes, además del sábado por la mañana, para darse a conocer al público.

Abanca se encuentra inmersa en un proceso de renovación de sus oficinas y el modelo de la sucursal de Payo Gómez se copiará, en mayor o menor medida, en otros locales. Hasta el momento, la entidad ha reformado 122 sucursales, con una inversión de 26 millones.