La empresa Samyl, que comenzará a gestionar mañana el servicio de conserjería del Fórum Metropolitano, pretende modificar las condiciones de trabajo de los empleados de la anterior concesionaria, a la que acusan de intentar reducirles el sueldo y los derechos adquiridos, según denunciaron empleados. Los afectados han sido advertidos de que deben firmar un documento en el que aceptan las nuevas circunstancias en las que se desarrollará su labor, ya que en caso contrario ni siquiera podrán presentarse a trabajar el 1 de marzo.
La denuncia de estos trabajadores fue recogida por el grupo municipal socialista, que exige al Gobierno local que lleve a cabo un mayor control sobre las concesionarias de los servicios municipales, ya que problemas de este tipo se produjeron anteriormente con el cambio de contrato del servicio de conserjes de los centros cívicos y el de la limpieza de los colegios públicos.
El Ejecutivo municipal respondió ayer mismo que desconocía la existencia de esta situación y que hoy se pondrá en contacto con ambas partes, al tiempo que reiteró su "hondo compromiso" con el mantenimiento de los derechos tanto de los trabajadores del Concello como de los de las empresas que le prestan servicios. El Gobierno local recordó además que fue el primero que introdujo cláusulas sociales en la contratación.
En el escrito remitido por Samyl a los empleados de la conserjería del Fórum se menciona que el pliego de condiciones del concurso mediante el que ganó la concesión le obliga a ofertarles un contrato de trabajo "de naturaleza equivalente al que vienen disfrutando", en el que además se les respetará la antigüedad adquirida y que será "ajustado a las condiciones económicas y sociales" del convenio del sector.
Pero el mismo documento advierte de que esta oferta "no supone ningún reconocimiento de subrogación o sucesión empresarial" con respecto a las condiciones que los trabajadores mantenían en la anterior concesionaria del servicio y que no firmar será entendido como un rechazo del trabajador a la propuesta.
