Cuatro meses después de la entrada de que las doce primeras líneas interurbanas -además de la del aeropuerto que ya lo hacía- llegaran al centro desde los municipios de Oleiros, Cambre, Culleredo y Sada, ayer fueron diecisiete las que se incorporaron a esta iniciativa de la Xunta. Plaza de Pontevedra, Entrejardines, plaza de Ourense y Costa da Palloza son las paradas que efectúan los buses que proceden de Boedo, Meicende, Arteixo, Malpica, Caión, Carballo, Fisterra, Montouto, Cesuras, Abegondo, Oza dos Ríos, Curtis y Pravio.

Tanto la Xunta como Arriva, la empresa que aporta más líneas a esta segunda fase del plan de acceso al centro, explicaron que el proceso se desarrolló sin incidencias en el tráfico, a pesar de que son 63 las expediciones que se realizan en cada jornada. "Cuanto más atractivo sea el transporte público, más viajeros ganaremos, y cuantos más viajeros gane, mejores posibilidades tendrá el transporte", destacó Ovidio Rodeiro, delegado de la Xunta en A Coruña, que viajó hasta la plaza de Pontevedra a bordo de uno de estos autobuses junto con otros cargos públicos del PP de la comarca.

Rodeiro recordó que en la primera fase del plan fueron 200.000 los viajeros que utilizaron el transporte metropolitano en tres meses y que uno de cada tres usó las nuevas paradas. Pero el representante del Gobierno gallego confirmó que se mantendrá la petición al Concello coruñés para que se anule el paso por Entrejardines de las líneas de Arriva, como solicitó la empresa antes del inicio de esta segunda fase al entender que esa parada crea confusión entre los usuarios y alarga el tiempo de viaje.

"Variando levemente ese recorrido estaríamos mejorando el corredor de Arteixo", explicó Rodeiro, quien anunció que la Xunta "va a insistir" para que se aplique ese cambio con el fin de que las líneas afectadas sean "más eficientes". En esa misma línea se pronunció Juan Gómez, director general de Arriva Galicia, al comentar la experiencia del primer día de funcionamiento del plan para las líneas de su compañía. "Esperemos que la Administración lo resuelva cuanto antes para que quede todo unificado", manifestó el directivo, quien puso de relieve que durante el viaje que los políticos hicieron en el bus varios usuarios les transmitieron su queja por este problema.

Gómez admitió que el hecho de que en función de que la línea entre por un corredor u otro se llegue y se salga de paradas diferente crea confusión entre los usuarios, a lo que añadió: "Si todos llegan y salen del mismo sitio habrá más frecuencias".

Al pie del autobús con el que llegó a la ciudad, Carlos Calvelo, alcalde de Arteixo, calificó de "noticia muy positiva" la entrada de los buses metropolitanos al centro, que interpretó como "una apuesta de las administraciones por el transporte público". Calvelo consideró que este sistema "da mucha más facilidad para todo el mundo" pero advirtió que es necesario un "trabajo importante de información a los vecinos". José Manuel López, alcalde de A Laracha y quien también viajó en el autobús hasta la plaza de Pontevedra, expresó su deseo de que "estas mejoras en el transporte público hagan que más gente sea usuaria". A su juicio, la creación del transporte metropolitano ya tuvo un impacto positivo en su municipio, por lo que vaticinó que la llegada al centro de A Coruña "va a hacer que cada día haya más usuarios cuando la gente conozca los servicios y las ventajas".

Buena aceptación

También el director general de Arriva Galicia incidió en este aspecto, ya que señaló que el acceso al centro de la ciudad tuvo "bastante buena aceptación porque facilita mucho las cosas". Juan Gómez reclamó que las dos fases que aún quedan por implantar de este plan se pongan en marcha "inmediatamente porque va en beneficio del usuario" y se mostró convencido del incremento de viajeros que generará esta iniciativa al estimar que a quien ahora usa el vehículo privado "le compensará bastante dejarlo en casa porque al gasto en gasolina hay que añadir el del aparcamiento o el de la ORA".

El inicio de la segunda fase del plan fue aprovechado ayer por la asociación animalista Libera para reclamar que se autorice el viaje con animales de compañía en estos autobuses, ya que ahora está prohibido. El colectivo destacó que esta medida impide acudir al veterinario, pasear o visitar una zona de ocio canino, por lo que propuso a la Xunta que adopte modelos de otras ciudades españolas y europeas.