La escritora Marta Sanz suele anotar en la última página de los libros que lee un breve resumen de lo que le han parecido. "Para no olvidarme", indica. Y es que cada una de esas obras le han formado no solo como lectora sino también como escritora. Esta viernes, dentro de una iniciativa de la Fundación Coca-Cola, ha dado una clase magistral a profesores de Secundaria en el Palacio de Capitanía para revelar qué títulos le han cautivado y cómo hacer que los jóvenes se adentren en el mundo de la lectura. Estos son algunos de los libros que le han marcado.

'Esther y su mundo', de Purita Campos. Con los tebeos, la escritora empezó a "sentir fascinación por las historias". Esther y su mundo le permitió no solo disfrutar de los dibujos sino que "alucinaba con las cosas que supuestamente hacía una niña de 13 años de la periferia de Londres". Las viñetas llevaron a Marta Sanz a conocer "otras maneras de vivir y culturas". De estos tebeos recuerda "la historia de orfandad y la primera conciencia del cuerpo y la sexualidad".

'El Lazarillo de Tormes'. Ya en Bachillerato, se sintió cautivada por las obras de Azorín y Antonio Machado. Pero si tiene que escoger un libro de aquellos años ese es El Lazarillo de Tormes. "Disfruté muchísimo con este libro. Me quedo con esa falsa autobiografía, de cómo cuentas una historia para justificarte y que lo más importante en la literatura es lo que no se dice", confiesa. Obras como esta llevaron a Sanz a estudiar Filología Hispánica.

'La sonata de otoño', de Valle Inclán. Aunque asegura que no podría quedarse con solo una obra de Valle Inclán, se atreve a recomendar La sonata de otoño. "Fue un gran descubrimiento literario para mí", reconoce. La escritora recuerda haberse quedado "con la boca abierta" cuando leyó este libro publicado en 1904. "Me fascinó la relación de lo erótico con lo tanático, los ambientes, las descripciones... Me pareció algo apabullante", comenta.

'Episodios Nacionales', de Pérez Galdós. "Sacaba muchas cosas de aquellos libros. Aparte de esa visión de la permanente España sórdida y negra, el placer de la aventura", apunta. Este fanatismo por Galdós fue herencia de sus padres y abuelos. Lo que más le atrae de estos Episodios nacionales es la narración, que cambia según el momento histórico que se cuente. "Es una lectura interesante para un público joven que quiera conocer la historia de este lugar donde vivimos".

Las novelas de Julio Verne. Marta Sanz se define como "permeable" cuando se habla sobre recomendaciones de libros. Su padre siempre le insistió en que no dejase al margen las obras de Julio Verne. "Estaba preocupado porque decía que no leía", recuerda. Leyó La vuelta al mundo en 80 días, pero fue La isla misteriosa la que llamó más su atención. "Es un libro que tiene su dificultad. No solamente son aventuras. Hay discursos sobre botánica e ingeniería", detalla.

'El criticón', de Baltasar Gracián. "Nunca pensé que este libro me fuese a gustar tanto", confiesa la escritora. Después de engancharse a los libros de caballería en la universidad, dio con El criticón. "A veces tenemos prejuicios equivocados sobre los libros. Este lo veía muy gordo. Cuando lo leí, me di cuenta de que eso no importaba. Tiene sus puntos divertidos", agrega.

'El amante', de Marguerite Duras. Uno de los libros que más le ha marcado en su carrera profesional. "Me dio la idea de que casi todos los textos literarios nacen de una pulsión autobiográfica", manifiesta. La obra de Duras enseñó a Sanz que "se puede hablar de sentimientos muy intensos con una voz fría y cortante".

'Otra vuelta de tuerca', de Henry James. "Hay relatos que por dentro son como mecanismo de relojería". Y este es uno de ellos. Es lo que saca la escritora de Otra vuelta de tuerca de su lectura. "Al final, el lector solo se tiene que quedar con el tic tac. Hay que hacerlo de forma natural, aunque la literatura es un ejercicio de manipulación", resume.

'El bello verano', de Cesare Pavese. La obra se centra en el paso de la adolescencia a la madurez. Con este libro, Marta Sanz comprendió "lo vulnerable que es la felicidad". Esta lectura le hizo disfrutar pero, sobre todo, aprender. "Aprendí algo que desgraciadamente los seres humanos aprendemos con el paso del tiempo y es que en los aspectos más sórdidos y más terribles de la vida, puede haber destellos que nos enseñen cosas", expone.

'Alias Grace', de Margaret Atwood. "Es la historia de una muchacha que fue metida en la cárcel porque supuestamente había participado en el asesinato de los señores de la casa en la que estaba sirviendo", resume la ganadora del Premio Herralde de Novela y el Ojo Crítico de Narrativa. "Me encantó", añade.

'Un debut en la vida', de Anita Brookner. Cuando lo tuvo en sus manos, pensó que sería una obra "muy académica y británico-sarcástica". Pero le sorprendió y quizá eso también le cautivó. "Acaba siendo un retrato de las relaciones paternofiliales absolutamente maravilloso. Está escrito con una elegancia sobresaliente", explica.

'Honrarás a tu padre y a tu madre', de Cristina Fallarás. Marta Sanz asegura que "una lectora nunca deja de formarse". Por eso aún hay libros que se ganan un hueco importante en su librería. Honrarás a tu padre y a tu madre es uno de ellos. "Habla de cómo las pequeñas historias y traumas de la vida privada están ligados a los grandes acontecimientos históricos", revela.