Frecuencias. En eso se resumen las peticiones de los vecinos de Eirís. "Con frecuencias", repite la presidenta vecinal Mónica Díaz, "podemos cruzar muchos buses" y validar la apuesta por los transbordos. Pero para ello hacen falta más conexiones con el barrio. "A las 22.45 ya no tenemos bus para subir y a las 22.40 para bajar, cuando hay otras líneas que a las 23.40 todavía se están moviendo", denuncia Díaz, quien reclama paradas en el barrio para poder usar los autobuses metropolitanos.