Los agentes de la Patrulla Verde de la Policía Local mantienen una lucha diaria contra los dueños de los perros que no recogen las deposiciones de sus mascotas. Los policías de esta división, que no van uniformados y que se desplazan en vehículos que no están rotulados, aseguran que hay dueños de canes que salen a pasear y que, aunque lleven la bolsa en la mano para dejar la calle tan limpia como la encontraron, si ven que están solos y no hay nadie que les pueda decir algo, no se agachan después de que sus perros defequen. "Miran para los lados y se van", decía ayer el inspector que coordina la Patrulla Verde, Ángel Merelas.