Esperas de 60 minutos para recibir atención y más de 70 personas en lista de espera a poco más de una hora para el cierre del servicio, a las dos de la tarde. Situaciones como estas se viven desde hace semanas en el Registro Municipal, especialmente en el departamento del padrón y los cambios de domicilio. El motivo principal que explica estos inconvenientes es, según denuncia el grupo del BNG en la Corporación, es la supresión de los trámites administrativos relacionados con el empadronamiento que hasta hace un tiempo se hacían en el Centro Ágora y en el Fórum Metropolitano, y que ha provocado, añade, protestas de usuarios por la tardanza en las tramitaciones y de los trabajadores municipales por situaciones de estrés.
Los nacionalistas aludirán a "colapsos continuados" y a la "situación caótica" por la que pasa el Registro en el próximo pleno, en el que reclamarán mediante una moción la restauración de los servicios del padrón que fueron retirados del Ágora y del Fórum. Además solicitarán reformas en estas instalaciones municipales, en las que señalan que no hay aseos, ni sistema de ventilación ni espacios suficientes para que los usuarios puedan sentarse mientras esperan su turno.
El BNG preguntó en los plenos de septiembre y octubre por la acumulación de trabajo en el Registro del Palacio de María Pita y recibió como respuesta del Gobierno local que los colapsos eran "puntuales" y que el Concello iba a implantar un sistemas de turnos por número.
