El ofimático, atascado en complejas tramitaciones urbanísticas con las que carga la administración local y que desesperan a promotores, a vecinos afectados y a futuros residentes, se arregla con pequeños pasos que no ocultan los retrasos que padece. El Ejecutivo municipal aprobará el próximo lunes en una sesión extraordinaria de la Junta de Gobierno Local dos convenios entre el Concello y Unión Fenosa Distribución por los que la compañía eléctrica dispondrá de las infraestructuras del polígono donde se ejecutaron las obras de urbanización para poder solicitar a la Xunta el alta de suministro en esa zona donde ya están construidas las viviendas de tres de las cooperativas. Este trámite permitirá a estos propietarios realizar a continuación las pruebas eléctricas en sus edificios previas a la concesión, por parte del Ayuntamiento, de las licencias de primera ocupación.

Los convenios están relacionados con el soterramiento de las líneas aéreas de media y baja tensión existentes en el parque ofimático, una obra que ya está ejecutada, según informa el edil de Rexeneración Urbana, Xiao Varela. Ahora Fenosa podrá dar suministro eléctrico en el ámbito del polígono ya urbanizado, de manera que los cooperativistas podrán evaluar el funcionamiento de la calefacción, las calderas, la presión de las bombas de achique de agua o los ascensores, entre otros servicios de sus viviendas. Si estas pruebas no registran ningún problema, recibirán el permiso que habilita la ocupación y tendrán la declaración de vivienda de protección, según explica el portavoz de la cooperativa A Carnocha, Luciano Ron.

La aprobación de los dos convenios es una etapa más de las que implica al Concello y a Fenosa en la tramitación del ofimático, pero aún quedan más capítulos. El área de Rexeneración Urbana señala que la compañía eléctrica tiene que retirar las tres torretas de media tensión que hay en el polígono, un paso que deberá ir acompañado previamente de la garantía de un suministro alternativo de electricidad para los vecinos del ámbito de Elviña incluido en el ofimático, al otro lado de la avenida Alfonso Molina.

El Gobierno local y Fenosa no han resuelto todavía este trámite, un requisito del que las partes no informaron cuando a finales de enero concluyó el plazo previsto de seis meses para que terminasen los trabajos de urbanización, sino que lo hizo el Concello semanas más tarde y después de haber dado marcha atrás en la aprobación de una prórroga de cinco meses a petición de la concesionaria de las obras.

Falta por aclarar en qué momento Fenosa desmontará las torres, si es que decide hacerlo o mantenerlas inactivas algún tiempo más. En la zona que ocupan después el Concello tendría que realizar unos trabajos finales.