La ejecutiva local del PSOE vive su primera crisis días antes de cumplirse tres meses desde que se conformó, el pasado mes de febrero, cuando un grupo próximo a Mar Barcón y la línea tradicionalmente crítica y más afín a Gonzalo Caballero pactaron una lista de integración. Las discrepancias parten de la toma de decisiones políticas al margen de la secretaria general y de las diferencias sobre quiénes deben integrar un órgano permanente que aglutine a parte de la ejecutiva destinado a agilizar la toma de decisiones políticas, ente que por ahora solo se había formado con carácter provisional. Fuentes del partido interpretan que estas discrepancias están relacionadas con la próxima elección del candidato a la Alcaldía. Las partes intentarán esta semana reconducir la situación.

Los desacuerdos alrededor del ente provisional formado a la espera de concretar la composición del permanente, se centran en quiénes deben sumarse a él, según miembros de la agrupación socialista coruñesa. Según las mismas fuentes, un grupo próximo a la exsecretaria general, Mar Barcón, reclamó la inclusión de militantes de confianza en lugar de otras figuras de consenso como Florencio Cardador y cuestionó la participación con voto del portavoz municipal o miembros del grupo en el Concello. Militantes próximos a la secretaria general señalan que se pusieron en alerta cuando integrantes de ese organismo aún provisional dentro de la ejecutiva, como Juan Ignacio Borrego, dieron pasos que entendieron al margen de Martínez, como la rueda de prensa para pedir la dimisión del edil de Mobilidade Sostible.

Las discrepancias motivaron la convocatoria de urgencia de una reunión de la ejecutiva el lunes pasado. De los 39 miembros que la integran, faltaron once, dieciocho asistieron y unos diez reclamaron en el exterior que se atendieran sus demandas o no entrarían, según fuentes del partido. El clima de tensión llegó al punto de que ayer se rumoreó entre integrantes de la agrupación socialista que tres de los afines a la exsecretaria general y a Borrego habían dimitido.

La lectura de estas diferencias se interpreta en la agrupación local como tensiones surgidas en el camino hacia la elección del candidato a la Alcaldía. Afines a Martínez Acón sostienen que Borrego pretende ganar posiciones para postularse como candidato socialista a las próximas elecciones municipales, que se celebrarán en 2019, mientras que los próximos a Borrego aseguran que la secretaria general, en contra lo "pactado" en un primer momento, quiere postularse para liderar la lista socialista en los comicios.

La secretaria general admite que ha habido "discrepancias" pero las interpreta como "ajustes normales, sobre todo en una ejecutiva tan grande". Asegura que este viernes se reunió con el secretario de organización, Fito Ferreiro, y que ambos conversaron en "tono cordial" y acordaron hablar de nuevo esta semana para llegar a un entendimiento y reconducir la situación. La actual ejecutiva surgió de un acuerdo entre los partidarios de la actual secretaria general y los afines a la anterior.