El tercer proceso participativo puesto en marcha por el Gobierno local para incluir iniciativas ciudadanas en el presupuesto está a punto de culminar su primera fase, la de presentación de propuestas. A cinco días de que termine el plazo, el lunes 14 de mayo a las doce de la noche, hay más de 400 ideas remitidas al Concello a través del canal A Porta Aberta en la web municipal, que, como el año pasado, vuelven a reflejar el interés y la preocupación de gran parte de los vecinos por diversidad de asuntos relacionados con la movilidad y el medio ambiente.

Ambas áreas están estrechamente vinculadas en una misma propuesta o incluso se entrelazan con otros departamentos municipales, en general las infraestructuras. Todavía no toca votar. Eso ocurrirá, primero, en las fases de apoyos y evaluación, para priorizar las iniciativas viables, y después, en la votación final, de la que saldrán los proyectos con más respaldo para los que el Gobierno local dedicará tres millones de euros en el presupuesto de 2019. Es un millón para toda la ciudad y dos millones repartidos de forma equitativa entre los diez distritos.

Distintas propuestas sobre carriles para bicicletas, el carril bus o el funcionamiento de los buses urbanos, la tarjeta Millenium, el tranvía turístico, la avenida de la Marina y Los Cantones, San Andrés y la doble fila de aparcamiento, figuran en el apartado de iniciativas dedicadas al conjunto de la ciudad, aunque también hay coruñeses que las demandan en concreto para los distritos donde viven.

El uso de la bici genera numerosas ideas, desde la mejora del carril exclusivo en el paseo marítimo hasta la extensión de la red a carriles de poco uso o a Eirís y Os Rosales; de arreglos en la zona de la Domus al tránsito compartido con vehículos. Son llamativas propuestas como la imposición de multas a quienes usen la bici en las aceras, la creación de aparcamientos para bicis cubiertos o vigilados y la adopción de las reglas vigentes en Holanda para el uso de la bicicleta.

El ámbito medioambiental se abre a propuestas variadas: algunas son ambiciosas, como la creación de un gran parque en el espacio que hay entre la tercera ronda y O Ventorrillo o en el entorno del castro de Elviña -iniciativa ya presentada en las dos ediciones anteriores de los presupuestos participativos- o la construcción de una minicentral eólica o solar. Otras son más próximas al ciudadano, entre ellas la ocultación o soterramiento de contenedores, la instalación de farolas solares, la apertura de más puntos limpios, la habilitación de espacios para que orinen los perros y la información del estado de las playas del Orzán y Riazor.

Los Cantones se conciben como espacio aprovechable por algunos vecinos que han acudido al canal A Porta Aberta para sugerir su reurbanización con la limitación del tráfico rodado y el aumento del mobiliario urbano y la vegetación. Otros ciudadanos proponen que la recuperación de la cárcel vaya más allá de la proyectada por el Gobierno local y se reforme más zonas del edificio. Hay quienes apuestan por que se ponga de nuevo en funcionamiento el tranvía turístico y se dé uso a las arcadas de Riazor.