La nueva Ejecutiva de la Agrupación Socialista de A Coruña se reunió esta mañana para reorganizarse después de las nueve dimisiones formalizadas esta semana, tres meses después de la renovación del órgano, de 39 miembros. Pese a que fuentes de los críticos avanzaban que habría más ceses a lo largo de la semana, la secretaria general, Eva Martínez Acón, informa de que nadie ha tomado esa decisión y que por el momento no se sustituirán a los dimisionarios dentro del órgano. Ella misma asumirá la portavocía dejada por Juan Ignacio Borrego, que también era uno de los dos vicepresidentes, cargo que solo ocupará ahora el abogado Rafael Arangüena, que suena en las quinielas de alcaldables del PSOE coruñés.

Martínez Acón indica que participaron en la convocatoria de ayer 24 de los 30 miembros con los que se ha quedado la Ejecutiva tras las renuncias, consumadas por discrepancias con la dirección, a la que acusaron de exceso de control en el funcionamiento de la directiva. Las decisiones de ayer se tomaron por unanimidad en "10-15 minutos". Uno de los salientes es el concejal Fito Ferreiro, que ocupaba el cargo de secretario de Organización, que ahora estará en manos de María Jesús Guardado, Cani, con Sonia Lema en la Secretaría de Administración. Javier Fernández Mariño será responsable de Cultura, con Luis Rodríguez como adjunto.

Acón interpreta la crisis de la semana como "un ajuste interno después de una época de gestora". Entiende la marcha de sus compañeros "si no comparten" la organización prevista, "más horizontal y participativa". Defiende que el suyo es un proyecto inclusivo y que cuenta con las diferentes sensibilidades para el trabajo que se avecina.