Las inversiones propuestas por la Xunta de Galicia al Ministerio de Fomento para la mejora de la línea férrea entre A Coruña y Ferrol suman 135,5 millones de euros y afectan a toda clase de actuaciones relacionadas con este medio de transporte, entre las que la rectificación del trazado de las curvas sería la más costosa, con 60 millones. Así figura en el estudio elaborado por la Consellería de Infraestruturas, que no solo detalla qué problemas sufre este itinerario en la actualidad, sino también cuáles serían las soluciones para ellos, su cuantificación económica y el plazo en el que deberían llevarse a cabo.

La intervención que el documento menciona en primer lugar es la construcción de la variante de Betanzos, de forma que sea innecesario dar marcha atrás desde la estación de Betanzos-Infesta para continuar hacia Ferrol. Esa obra afectaría a un tramo de 2,6 kilómetros y requeriría una inversión de 25 millones de euros que, según el estudio, debe efectuarse antes de 2020. La entrada en servicio de la variante supondría reducir el viaje A Coruña-Ferrol en diez minutos para dejarlo en 55 si no se realizan paradas, lo que lo dejaría en el mismo tiempo que el autobús.

La electrificación de la línea y la sustitución de los vehículos empleados en la actualidad, que proporcionaría una mayor velocidad a los convoyes que recorren esta ruta, es otra de las propuestas planteadas, para la que se estima un coste de 26 millones. Esta actuación debería realizarse en los 68,9 kilómetros que separan las dos ciudades y también tendría que ejecutarse con el año 2020 como límite temporal.

En la misma línea va el proyecto de la supresión de diez pasos a nivel existentes en la línea, cuyo coste se calcula en 5 millones, así como la rectificación de curvas en un total de 20 kilómetros, para la que se consideran necesarios 60 millones. Ambas intervenciones pretenden reducir el tiempo de viaje mediante la mayor velocidad de los trenes e igualmente se defiende que se acometan antes de 2020.

La última de las medidas propuestas en este capítulo son dos nuevos puntos de cruce, con el fin de evitar las esperas de los trenes que circulan en sentido diferente. Para esta obra serían necesarios 6 millones de euros.

El estudio propone también la realización de inversiones para mejorar la imagen, la funcionalidad y la seguridad del transporte en esta línea, todas ellas con el año 2020 como fecha en la que deberían estar efectuadas. La primera que cita es la renovación de la línea mediante el gasto de 4 millones, a lo que habría que sumar el cerramiento de todo el recorrido para evitar la entrada a las vías por motivos de seguridad, que haría precisa una inversión de 9 millones.

El informe defiende además la adecuación de las estaciones existentes en la línea con la introducción de mejoras en sus zonas de aparcamiento, así como mediante la realización de obras que faciliten la accesibilidad de todos los usuarios, aunque es el único apartado en el que no cuantifica su coste. Sí lo hace para la última de las propuestas de este capítulo, la construcción de aparcamientos disuasorios junto a las estaciones de A Coruña y Ferrol, que presupuesta en 500.000 euros y cuya ejecución plantea también para antes de 2020.

La Xunta incluye en el estudio cuatro medidas que deberían implementarse este mismo año y que tienen por objetivo favorecer la intermodalidad entre el ferrocarril y otros medios de transporte. La puesta en marcha de estas iniciativas no requeriría inversiones, de acuerdo con el documento, ya que solo consistiría en la reorganización del servicio que presta Renfe en la actualidad en este corredor.

Entre esas medidas aparecen la mejora del funcionamiento del servicio con la oferta de trenes expreso que cubran la demanda de los trabajadores y estudiantes en los horarios de entrada y salida en las comarcas de A Coruña y FerrolA Coruña y Ferrol, por lo que deberían ajustar sus horarios a los momentos en los que se produce una mayor necesidad de transporte. El estudio propone que las paradas se ubiquen, además de en ambas cabeceras de la línea, en Pontedeume y Cabanas, Betanzos y Elviña-Universidad. A esta propuesta habría que añadir la de los servicios complementarios, que también efectuarían paradas intermedias en Perlío, Perbes, Miño y O Burgo.

El incremento de las frecuencias mediante la puesta en servicio de más trenes y con mejores horarios es otra de las medidas sugeridas, para la que se plantea ajustar la oferta de viajes entre las dos ciudades a las horas de mayor demanda de movilidad, de forma que se ofrezcan más en esas franjas y menos en las calificadas de valle.

Según el estudio, entre 08.00 y 09.00, 14.00 y 16.00, así como 19.30 y 20.00 horas, el servicio es insuficiente para acceder a A Coruña, cuando el autobús proporciona en esos tramos recorridos cada media hora. En el caso de Ferrol, esa situación se produce de 07.00 a 08.00, de 14.00 a 15.30 y de 19.30 a 20.00 horas, para las que solo hay tres servicios ferroviarios, frente a los buses que llegan a esa ciudad cada media hora.

La mejora de la conectividad es otra medida de este apartado, para lo que se defiende la coordinación con los servicios que prestan FEVE, el tren que se dirige a Santiago y Vigo, así como los autobuses urbanos. El informe destaca que los horarios actuales del ferrocarril de vía estrecha desde Viveiro y Ortigueira dificultan su complementariedad con el tren A Coruña-Ferrol, y que los enlaces de Renfe en esta última línea no se coordinan con los trenes que continúan hacia la capital gallega.

En el caso del transporte urbano, el estudio aconseja que las paradas estén próximas al acceso peatonal de las estaciones y que la frecuencia de paso de los autobuses sea de entre 10 y 15 minutos. La próxima construcción de estaciones intermodales en ambas ciudades favorecerá la coordinación entre estos dos medios, según la Xunta.

La última de las medidas propuestas es la integración de las tarifas entre el tren y el autobús para ofrecer un servicio más atractivo. La oferta de un billete combinado de ambos medios, la creación de bonos de ida y vuelta, así como la inclusión del ferrocarril en el Plan de Transporte Metropolitano son las iniciativas planteadas.