Solo un día después de la sentencia del caso Gürtel, que condena al PP por beneficiarse de un "sistema de corrupción institucional", y al mismo tiempo que el PSOE registraba una moción de censura contra el presidente del Gobierno, el Partido Popular de A Coruña apuntaba ayer en otra dirección, al Ejecutivo local, para exponer un "demoledor" balance de tres años de gestión. A preguntas de los periodistas, la presidenta, Beatriz Mato, virtual candidata a la Alcaldía, expresó su malestar e "indignación" por las "malas prácticas" de su partido, aunque con el convencimiento de que los escándalos relacionados con la corrupción del PP a nivel nacional no le van a pasar factura a la formación política en el ámbito municipal dentro de un año, al entender que los comicios locales tienen "un marcado carácter personal".

"Los vecinos irán a votar y dirán quién quieren que les marque el futuro de la ciudad: alguien que gobierna para ellos mismos y sus firmantes, como ha demostrado Marea, u otros que queremos que la ciudad vaya para delante y sea un referente en distintas áreas. Tengo claro que las elecciones municipales son de marcado carácter personal. Estoy convencida de que los coruñeses evaluarán a los equipos de gente que se pondrán enfrente", augura Mato.

Antes de quitarle repercusión a las consecuencias de la sentencia de la red Gürtel, la también conselleira de Medio Ambiente no se pronunció con contundencia ante preguntas sobre el futuro inmediato del PP. A la cuestión de si cree que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, debe dimitir contestó que "el Gobierno tiene que ceñirse a seguir trabajando porque se han aprobado unos presupuestos que van a marcar el futuro del país" y receló del devenir de la moción de censura. Preguntada por si el PP debe pedir disculpas se limitó a decir que "es importante reconocer los errores que se han cometido" y abogó por "garantizar que esto" (los casos de corrupción) no se vuelven a producir.

Mato reiteró su "ilusión" por trasladar su experiencia política al terreno municipal, pero de nuevo sin poner fecha al abandono de la Consellería para ejercer como candidata oficial a la Alcaldía: "A día de hoy soy conselleira, no se trata de cuándo dejar de serlo. Esto es algo muy personal porque el presidente de la Xunta elige a su equipo personalmente y él decidirá cuándo cuenta o no cuenta con alguna persona".

En su repaso a la labor del Gobierno local, la presidenta de los populares de A Coruña calificó su gestión como "tres años y un día de castigo". Mato acusó al alcalde, Xulio Ferreiro, de "girar demasiadas facturas" a los ciudadanos: "La factura del amiguismo, la de la falsa participación, la de la ausencia de diálogo y la de la continua rectificación". La virtual candidata a la Alcaldía avanzó que en el próximo año de mandato "el PP presentará un programa ilusionante" y se marcó como objetivo "devolver a A Coruña a la posición de referente nacional que le corresponde".