Casi mil ideas ha recibido el Gobierno local para entrar en la carrera de meterse en los presupuestos del próximo año. El Concello destina tres millones de euros a hacer realidad algunas de las propuestas que vecinos y colectivos ponen encima de la mesa y que pasan un proceso de selección y de votación a través de la plataforma A Porta Aberta.

De las 909 propuestas recibidas este año, 696 son viables, por lo que 213 no pasarán a la segunda fase del proceso, la de captación de apoyos entre todas las personas mayores de 16 años y empadronadas en la ciudad que quieran participar. El plazo se abrió ayer y se cerrará el 13 de junio. Será entonces cuando los técnicos municipales cojan los proyectos más votados y los estudien y los tasen para ver si tienen encaje en los próximos presupuestos.

En este proceso hay dos categorías, una para toda la ciudad, con una dotación económica de un millón de euros, y otra para los diez distritos de la ciudad, en este caso, cada uno de los barrios cuenta con una partida de 200.000 euros para poner en práctica algunos de los proyectos solicitados por quienes mejor conocen sus calles y sus necesidades.

Este año, como novedad, el Concello permite que cada una de las personas que se registre para votar pueda apoyar todas las propuesta para la ciudad que desee -primera categoría- y tres de distrito.

Pero ¿qué piden los vecinos para la ciudad y sus barrios? Las ideas de mejora de este año se centran en la plantación de árboles, también en la mejora de la movilidad, en la puesta en marcha de iniciativas que hagan de A Coruña un municipio más inclusivo y más participativo, ya que algunas de las iniciativas se centran en desarrollar aplicaciones informáticas que mejoren la comunicación entre los residentes y los servicios municipales.

La tarjeta Millenium vuelve a ser protagonista de algunas de las reclamaciones de los vecinos, uno de los usuarios propone que haya recargadores y comprobadores de crédito en las paradas del bus urbano, otro de los participantes va más allá y plantea la posibilidad de que el transporte público se pueda pagar con el móvil. Hay propuestas también para que, al igual que existe una escuela municipal de música, se ponga en marcha una escuela de teatro y otra de danza para poder acceder a esta formación artística de forma subvencionada. A uno de los usuarios le gustaría que en la ciudad hubiese un albergue juvenil y, a otro, que las playas de Riazor y Orzán tuviesen pantallas en las que se pudiese consultar información sobre el estado del mar y otros, que se extienda la red de paradas de Bicicoruña, proponen que haya estaciones frente a las bibliotecas y los centros sanitarios, incluso, que haya lavaderos para bicis en algún punto de la ciudad.

Hay ideas que se salen de los marcos más habituales, como la de una hacer un museo del cómic y la banda diseñada y otro de moda, o que haya papeleras solares que se iluminen por la noche cuando pasen peatones por su lado, o que haya colmenas, hoteles para insectos y cajitas para que los murciélagos puedan vivir mejor, o que se habiliten parques musicales para que los más pequeños puedan jugar también con la música.

Hay otras propuestas para toda la ciudad, como la instalación de expendedores de bolsas para recoger las deposiciones de los perros y también que se ponga en marcha un proyecto piloto de recogida selectiva de basura.

Para el distrito 1, que abarca los barrios de Bens y Nostián, los vecinos solicitan mejoras en el parque infantil y en la playa, así como que impulse la restauración del castro de Nostián.

Las propuestas para el distrito 2 hablan de instalar un rocódromo en el parque de Bens, de salvar los desniveles en el barrio de Os Rosales y en el monte de San Pedro, así como de la recuperación de los antiguos caminos de Penamoa.

Para el distrito 3, los vecinos piden la restauración del lavadero público de Cances y solicitan también que se habiliten plazas de aparcamiento para los trabajadores de las empresas cercanas a Marineda City que carecen de este servicio y que, actualmente, dejan sus vehículos en las inmediaciones del centro comercial, en el arcén de sus accesos. Piden también el arreglo del campo que hay delante del centro social de O Birloque.

Novo Mesoiro está en el distrito 4 y sus vecinos piden más servicios, desde una biblioteca completa y con todos los servicios, como tienen otros muchos barrios, a un centro para mayores y una piscina pública.

La zona de Maristas, que está en el distrito 5, solicita que se complete el alcantarillado, ya que hay "trece viviendas y una empresa de transportes" que carecen de él; piden también los vecinos más inversión en las excavaciones del Castro de Elviña, una zona de juegos en la urbanización Valaire y un parque biosaludable en A Zapateira.

Los vecinos del parque de Eirís piden muchas mejoras, entre ellas, que el Concello saque a concurso la concesión de una cafetería en este espacio, la renovación del parque infantil y la creación de un espacio multidisciplinar en las ruinas del castillo de Valparaíso. En O Castrillón, que es también del distrito 6, piden mejoras, sobre todo, en la movilidad y en la accesibilidad, por ejemplo, que haya una rampa mecánica para acceder al centro de salud y que se abra una biblioteca en Palavea.

El Coliseum está dentro del distrito 7, una de las ideas para 2019 es conseguir que todas las puertas de los baños tengan cerradura y que las cisternas funcionen correctamente. Dentro de este distrito, los vecinos también piden mejorar el parque infantil del Barrio de las Flores, la creación de un centro cívico en Matogrande, la mejora de la pista de baloncesto de la calle Álvaro Cunqueiro y que se reduzca la velocidad en la rotonda de Las Pajaritas con peraltes y badenes.

En el distrito 8 están el mercado de Santa Lucía y la plaza de Lugo, para el primero, piden un "arreglo definitivo", para el segundo, que la zona sea peatonal, los vecinos solicitan también un parque biosaludable en Vioño, actividades semanales en la plaza de Tabacos y canastas de baloncesto en los parques del distrito y un carril bici que discurra por Juan Flórez.

El distrito 9 es el de As Conchiñas, Riazor y el Agra do Orzán. Sus vecinos piden, sobre todo, más verde y una biblioteca en Riazor.

El distrito 10 es el del centro, hay candidaturas para peatonalizar la calle San Andrés, también para rehabilitar el quiosco de San Roque, en el Campo da Leña, el mercado de San Agustín pide una cámara de frío y también baños en la primera planta y los vecinos de Monte Alto, la creación de un campo de petanca.

Para conseguir más votos, el Concello propone que los ideólogos de las propuestas graben pequeños vídeos explicando el motivo de su reclamación y que los manden a presupostos.participativos@coruna.es.presupostos.participativos@coruna.es Para las personas que no tengan posibilidad de hacerlo en sus casas, podrán acudir el día 4 de junio al Ágora y, el 6 a la biblioteca de O Castrillón, donde habrá dos espacios de grabación. El número de propuestas casi se multiplicó por dos desde 2016.