El Concello ha enviado un nuevo requerimiento a la concesionaria de Nostián, Albada, para que proceda a sellar los dos depósitos, llenos desde 2007, de la planta de tratamiento de residuos, después de que el Superior avalase que sea la empresa y no el Concello la que tenga que asumir los trabajos. Advierte de que podrían declarar la caducidad de la concesión "sin derecho a indemnización". Empresa y Concello mantienen diferencias sobre el fin de la fecha de la concesión pero es la primera la que sostiene que debe finalizar en noviembre de 2019 y el Gobierno local, un año después.

El Gobierno local explicó ayer en una nota de prensa que la posibilidad de rescisión está incluida en el contrato de explotación. La concejal de Medio Ambiente, María García, se reunió ayer con los trabajadores, en negociación laboral con la empresa. García advirtió de que la concesionaria no puede usar a la plantilla "como moneda de cambio" en el conflicto con el Concello. Recordó que el Superior ha ordenado a Albada sellar los vasos.

La UTE Albada insiste en que, en 2010, envió al Concello coruñés un proyecto técnico y que el único "requisito pendiente" para abordar las obras es que se lo aprueben. Este requerimiento ya ha sido enviado en otras ocasiones. Una vez estudiados sus términos, el Gobierno local concluyó que, con este proyecto, Albada vuelve a pretender que sea la Administración local la que se encargue de los trabajos.

En la reunión con los trabajadores, la concejala de Medio Ambiente informó de que han recibido un dictamen del Consello Consultivo sobre el fin de la concesión de la planta de tratamiento. Albada la fecha en noviembre de 2019 y el Concello, en diciembre de 2020. El Consultivo, según informa el Concello, ha dictaminado que debe situarse entre febrero y septiembre de 2020, "emplazando al Concello a establecer una fecha exacta de la finalización de la concesión tras escuchar los argumentos de la empresa". El Consultivo, añaden, tiene "dificultad" para dictaminar cuándo empezó.