La profunda reestructuración que el grupo ComarComar, propiedad del empresario del juego José Collazo Mato, se ha llevado por delante al personal directivo del Palacio de la Ópera y del Palacio de Exposiciones y Congresos (Palexco) de A Coruña, cuya actividad gestiona en régimen de concesión, el primero con el Concello y el segundo con la Autoridad Portuaria, a través de la Sociedad de Fomento y Desarrollo Turístico. Esta empresa genera pérdidas durante los últimos cinco años que suman 12,5 millones, a la espera de los resultados de 2017, mientras que su plantilla, que había llegado a 27 personas en 2006, queda ahora en tan solo diez, por lo que sufre un proceso de declive que por el momento no tiene visos de concluir.

El descabezamiento de Palexco tendrá importantes consecuencias para la celebración de congresos en A Coruña, ya que los directivos del recinto son responsables de la captación de este tipo de acontecimientos. La abundancia de palacios de congresos en España genera además una gran competitividad en este sector, ya que este tipo de reuniones suponen una importante fuente de ingresos para las ciudades en las que se desarrollan debido a la elevada capacidad adquisitiva de los congresistas, que frecuentemente son profesionales de alto nivel.

Un posible descenso de la organización de congresos en A Coruña afectará así a uno de los pilares del Plan Estratégico de Turismo diseñado recientemente por el Concello, que considera este segmento de actividad como uno de los prioritarios.

Sociedad de Fomento y Desarrollo Turístico tuvo unas pérdidas de dos millones en 2016, un 56% más que el año anterior. A los problemas de Palexco, que se vio afectado por la caída de la actividad que motivó la crisis económica, se añaden los que causa el Palacio de la Ópera, cuyo deterioro obligó a la empresa concesionaria a efectuar una inversión de 843.000 euros con el fin de sustituir todas las butacas del edificioPalacio de la Ópera. Los daños apreciados en las instalaciones harían necesaria sin embargo trabajos por valor de dos millones que la compañía no parece dispuesta a asumir debido a su situación económica. Eso llevó a la matriz del grupo, Comar, a iniciar hace dos años una negociación con el Concello de A coruña que pretendía poner fin a la concesión del Palacio de la Ópera, cuya actividad está claramente condicionada por la Orquesta Sinfónica de Galicia, que reserva las instalaciones durante 200 días al año a cambio de una compensación de 850.000 euros.

Cuando se desveló la existencia de las conversaciones con el Concello sobre la posibilidad de que asumiese la gestión del Palacio de la Ópera, el concejal de Culturas, José Manuel Sande, reconoció que este sería el "destino natural" de la infraestructura, aunque advirtió que no se llevaría a cabo "a cualquier precio".

La otra concesión que posee la empresa el puerto, la del complejo Los Cantones Village, tampoco genera alegrías en el plano económico, ya que desde su apertura en 2005 debió reorientar su actividad como centro de ocio ante el continuo cierre de sus establecimientos. En la actualidad, la mayoría de su espacio está ocupado por la macrodiscoteca Pelícano y las salas de cine, por lo que buena parte del día el recinto permanece inactivo.

La concesión a la Sociedad de Fomento y Desarrollo Turístico de la gestión de Palexco y Los Cantones Village (inicialmente El Puerto Centro de Ocio) fue calificada de irregular en 2007 por una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. El fallo determinó que la Autoridad Portuaria de A Coruña concedió el contrato "a la peor de las tres propuestas" y que la construcción del edificio "empeoró el ya deficiente proyecto básico" que había sido seleccionado.

Al votar sobre los proyectos que se habían presentado al concurso, la Autoridad Portuaria defendió ante Xunta y Ayuntamiento el de la Sociedad de Fomento y Desarrollo Turístico al estimar más importante el palacio de congresos que el centro de ocio, ya que la "integración" de los nuevos edificios en la ciudad era "imprescindible".