El Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, dependiente del Ministerio de Hacienda, ha anulado la adjudicación del servicio municipal integral de control de plagas urbanas a la empresa Sanal Medioambiental SA. En una resolución del pasado mes de mayo, que acaba de hacer pública, el órgano estatal da la razón a la empresa Control de Plagas Andrade SL, que recurrió la decisión al ser apartada del proceso de licitación por presentar una propuesta económica con "valores anormales o desproporcionados".

Los miembros del tribunal confirman en el fallo que la proposición de la compañía que denunció el proceso era "normal y proporcionada" por lo que "no era posible su exclusión" del concurso. Añaden que, al no haber motivo para no tener en cuenta la oferta, el Gobierno local debe anular la adjudicación a la otra empresa y volver a valorar todas las de los licitadores admitidos y finalizar el proceso conforme a esta resolución.

Control de Plagas Andrade SL había presentado la oferta más baja de las cinco empresas que optaban al contrato, con un importe de 88.000 euros de los 140.000 marcados de inicio por el Ayuntamiento. Hacienda rebate que hubiera razones para que fuera apartada del proceso al ser la rebaja del 9,5% por debajo de la media y, por tanto, no alcanzar al umbral de temeridad que rige la licitación.

El Gobierno local ha cumplido en las últimas semanas el mandato del Ejecutivo central y está a punto de otorgar el contrato a la empresa recurrente, ya que ha quedado en primera posición en la nueva valoración de ofertas, justo por delante de la adjudicataria anterior, que ha asumido la tarea desde aquel momento de manera provisional.

Fuentes del Ayuntamiento mantienen que el servicio no ha quedado sin cubrir y, por tanto, nunca se ha puesto en riesgo la posibilidad de que apareciera algún tipo de plaga en la ciudad. Además, destacan que en la licitación se incrementó la cuantía del contrato existente anteriormente de 65.000 a 140.000 euros por considerar que el cuidado del espacio público es una acción "prioritaria".

El concurso municipal salió inicialmente publicado en el BOE el pasado mes de agosto y el objeto era la contratación del servicio integral de control de plagas en el municipio, incluyendo desratización, desinsectación y desinfección. La Concejalía de Medio Ambiente afirmaba que pretendía "prevenir y evitar riesgos" de proliferación de roedores, insectos y microorganismos, excluyendo en este contrato aves o plagas vegetales.

En el pliego de condiciones, la Concejalía de Medio Ambiente planteaba la creación de un plan anual de acción inicial y una posterior puesta en práctica y actualización durante los años del servicio. En el caso de la desratización, el ámbito de actuación sería las vías públicas, la red de saneamiento o los centros educativos, entre otros, mientras que, con respecto a la desinfección, se realizaría un control de legionella en colegios y sedes de servicios de emergencia así como en los aparatos de aire acondicionado. Por último, la desinsectación afectaría a la red de alcantarillado y locales municipales entre otras instalaciones.