Fuentes de Vueling alegaron ayer que la cancelación de ambos vuelos, el que iba de A Coruña a Londres y el que volvía cubriendo la misma ruta, se debió a "motivos operacionales", sin concretar nada más. Los portavoces de la compañía aérea aseguran, en contra de lo declarado por numerosos afectados, que avisaron de la suspensión de las conexiones una hora antes de la hora de salida y defienden que se realizó la recolocación de pasajeros "lo más pronto posible". Todos han sido, afirmaron ayer, recolocados y advierten de que, en las fechas en las que estamos, "no es tarea fácil", provocando, añadieron, que "la reubicación de algunos pasajeros se demorara más tiempo". Tal como relatan los usuarios, explican cómo ofrecieron vales para pernoctar en un hotel de la ciudad, incluyendo también las comidas y los traslados, y que se organizó, como de costumbre, realizando estas entregas día a día en el aeropuerto. Admiten que fue personal de la compañía aérea British Airways el que atendió a los afectados, ya que se ocupan del servicio en la terminal londinense, y defienden que se ofreció información detallada en inglés y español, punto que también contradicen los allí presentes.

Desde Vueling confirman que el vuelo VY7105, que debía partir de la capital británica, portaba a 177 pasajeros y que el otro, el VY7104, debía haber trasladado a otros tantos usuarios.