La Policía Local detuvo en la madrugada de este viernes a una pareja por agredirse mutuamente. El hombre, de 24 años, tenía una orden de alejamiento de la mujer, de 32. Ambos fueron denunciados por un delito de malos tratos en el ámbito familiar y el varón, además, por el incumplimiento de una resolución judicial.
Una patrulla del 092 se personó sobre las tres de la madrugada en un domicilio de la zona de Os Mallos alertada por vecinos que escucharon una fuerte discusión con gritos en una vivienda, desde la que alguien había arrojado una silla por una ventana. Los agentes entrevistaron a la pareja por separado y ambos coincidieron en admitir que se habían agredido uno al otro y causado lesiones tras haber salido juntos por la noche y comenzar una discusión al llegar al piso. Al comprobar en la sala del 092 los datos que proporcionaron a los policías, estos descubrieron que el joven tenía en vigor una orden de alejamiento de la mujer.
Tras ser llevados los dos a un centro sanitario para un reconocimiento médico, los agentes los trasladaron a dependencias policiales, donde fueron denunciados por malos tratos.
Golpes, amenazas e insultos
Los agentes de la Policía Local detuvieron también en los últimos días a otros dos hombres por supuestos delitos de violencia de género. La pasada madrugada intervino una patrulla en una calle del barrio de O Ventorrillo por la supuesta agresión de un hombre de 36 años a una mujer de 42. La víctima se puso en contacto con el 092 y relató a los agentes, en un estado de gran nerviosismo, que había mantenido una discusión con su expareja "por motivos intrascendentes", según apunta el parte policial, tras la cual él le propinó puñetazos y patadas mientras la amenazaba de muerte. Según relató la mujer, consiguió protegerse de los golpes con un taburete. El supuesto agresor fue localizado por otra patrulla policial en las inmediaciones de la vivienda momentos más tarde y fue detenido y denunciado.
La otra detención, la de un vecino de 35 años de Fene, se produjo el jueves a media tarde en la zona de Os Mallos por insultar y amenazar a su pareja, a quien llamó "puta vagabunda" y le dijo que la denunciaría para quitarle a su hija y "abrirla en canal". En la discusión que mantenía esta pareja en plena calle intervino otra persona que fue agarrada por el brazo y apartada por el hombre, pero que consiguió retirar de la zona a la mujer para conducirla al interior de un establecimiento. El hombre admitió que se había bajado del coche para recriminar a su pareja a raíz de una discusión previa que habían tenido por teléfono. La mujer fue trasladada a un centro médico debido a una crisis de ansiedad y a continuación denunció lo ocurrido en comisaría.
