La reunión que mantuvieron en la tarde de ayer varios concejales del Gobierno local con los vecinos de la Ciudad Vieja para explicarles la organización de este año de la Feria Medieval, que se celebrará en A Coruña entre los días 24 y 29Feria MedievalA Coruña , acabó siendo una reclamación casi unánime de los presentes de que se cancele en próximos años. Las molestias "enormes" que dicen sufrir, sobre todo con respecto a olores, horarios de cierre o limpieza, son las razones para pedir su anulación.

El presidente de la asociación vecinal, Pedro Roque, no es tan drástico en sus peticiones, pero sí está seguro, afirma, "de que hay que enfocarla de otra manera". Según el dirigente, la Feira das Marabillas "no es sostenible" y tampoco repercute de una manera visible en los comercios del barrio. "Para esta edición no habrá cambios, pero el rechazo al evento está planteado y desde la asociación trabajaremos para que, si se sigue haciendo, no moleste", explica Roque, que propone, por ejemplo, que los puestos de comida salgan del interior de las murallas, trasladándolos a O Parrote. De esta manera, razona, los vecinos se evitarían malos olores, problemas de limpieza o de volúmenes de música.

Como alternativa al modelo de Feria Medieval, desde la entidad vecinal anuncian que presentarán un programa de actividades para dinamizar el barrio, "no masificadas", advierten, y que puedan tener "incidencia" para los vecinos y los comerciantes.

Por su parte, los concejales de Culturas, Medio Ambiente y Mobilidade, José Manuel Sande, María García y Daniel Díaz, explicaron a los residentes que habrá, según el presidente de los vecinos del barrio, puntos de recogida de basura similares a lo del año pasado y que no habrá presencia de animales, otra cuestión ya conseguida en la anterior edición. Lo que no han aclarado, denunció Roque, es dónde estacionarán los propietarios de los puestos de la feria, ya que lo ya había asegurado el Gobierno local es que no podrían aparcar en plazas reservadas para vecinos. "¿Dónde estarán las furgonetas y vehículos de los feriantes? No sabemos dónde estarán ubicados y no se entiende", lamenta el representante de la Ciudad Vieja, que muestra su preocupación por este asunto.

Roque teme que la Feria Medieval de este año sea "igual de traumática que todos los años" pero mantiene su "compromiso" con los residentes de insistir al Ayuntamiento de A Coruña en "repensar" la próxima edición. Entre las ideas que surgieron ayer estaba la de ir disminuyendo el número de puestos de manera paulatina. "La modernidad no tiene que ver con esto y la dinamización tampoco. Tenemos que tener cultura como fuente de disfrute de ocio, no como esto", denunció el dirigente vecinal.