Veintitrés de los veintiséis colegios de educación Infantil y Primaria de la ciudad van a adecuar durante lo que resta de julio y en el mes de agosto sus áreas de juegos para mejorar sus condiciones de seguridad. La reforma será "integral", aseguró ayer el alcalde, Xulio Ferreiro, en la entrada de uno de estos centros, el CEIP Emilia Pardo Bazán, donde los trabajos comenzaron la semana pasada. El Gobierno municipal invertirá 224.000 euros.

El motivo por el que el Concello pone en marcha esta serie de intervenciones es que casi todas estas instalaciones educativas "están fuera de la normativa de seguridad" relativa a las áreas de juegos o zonas infantiles, situación advertida por la administración local en un estudio realizado durante este año en los centros para comprobar el estado de las zonas recreativas.

Algunas de las actuaciones que se llevarán a cabo son la reparación de los pavimentos de seguridad instalados para amortiguar los impactos en las caídas, con un espesor adecuado a la normativa; la corrección de los vallados que no respeten las distancias entre listones o la propia colocación de los mismos donde no los hay; la sustitución de papeleras por unas nuevas sin tapas; o el arreglo o cambio de elementos gastados o rotos que conlleven riesgos para los menores.

La normativa europea de calidad establece una serie de exigencias en materia de seguridad que deben cumplir las áreas infantiles de juegos para evitar accidentes. Las autoridades españolas determinan que esta norma sea de libre aplicación, aunque Galicia es una de las pocas comunidades que cuenta con regulación específica, mediante decreto, sobre parques infantiles aplicada a áreas de juego públicas y privadas.

Algunos aspectos técnicos que recoge el decreto aluden a que los equipamientos estén diseñados de forma que el riesgo relacionado con el juego sea apreciable por los niños y a que la superficie sobre la que puedan caer sea de materiales blandos. Ferreiro resaltó la conveniencia de emprender la reforma integral de las áreas de juegos de los colegios coruñeses aprovechando que el Concello cuenta por primera vez con un contrato de mantenimiento de estas áreas escolares.

En diez de estos centros -Sagrada Familia, Salgado Torres, Fernández Latorre, San Pedro de Visma, Manuel Murguía, María Pita, José Cornide Saavedra, Sanjurjo de Carricarte, Víctor López Seoane y Emilia Pardo Bazán- ya han comenzado las obras. Los dos siguientes serán Alborada y María Barbeito, esta semana; el resto lo harán antes de que empiece el próximo curso. Dos colegios no tienen áreas y otro ya la ha renovado.

Ferreiro, el edil de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, y la de Xustiza Social, Silvia Cameán, visitaron ayer el Emilia Pardo Bazán en compañía del director del centro, José Manuel García Yanes, y representantes de la comunidad escolar.