La Junta de Gobierno Local aprobará este viernes, en una reunión extraordinaria, la licencia de ejecución del nuevo almacén automático de la ampliación de las instalaciones de Estrella Galicia en A Grela. La licencia se le otorgará a la Corporación Hijos de Rivera después de que haya introducido las modificaciones solicitadas para ajustar las obras al plan general, entre ellas, incluir zonas ajardinadas en la parcela. Las obras se realizarán en dos fases y contarán con un presupuesto de más de cuatro millones de euros. Una vez concedida la licencia -que será aprobada este viernes- la empresa contará con seis meses para iniciar las obras y contará con un plazo de ejecución de 36 meses, es decir, tres años a partir de la notificación del permiso municipal.

La construcción de esta nave de 26 metros de altura es la única de todo el proceso que necesita una licencia municipal diferente, ya que, la ampliación completa tiene un presupuesto de casi doce millones de euros y cuenta con la demolición de un taller, de oficinas y una caseta de bombas, prevé la construcción de un edificio de envasado, este almacén automático y también una plataforma elevada para transportar mercancías.

En el expediente que irá a la Junta de Gobierno Local se informa de que los técnicos municipales informan favorablemente de la construcción de este almacén, ya que algunos de los puntos que no admitía la normativa actual fueron adaptados a ella.

No cambia, sin embargo, la altura de la nave, que será de 26,77 metros, a pesar de que el plan general fija el máximo en 16 metros salvo excepciones. El informe técnico municipal entendía que no era necesaria tanta altura para el correcto funcionamiento del almacén, aunque la nueva documentación entregada por la empresa justifica que esos 26 metros de altura son la "única opción viable" para el almacén, de modo que el Concello da por subsanada esta deficiencia.

La nave medirá 78 metros de ancho, 87 de largo y 26 de altura y está proyectado que su acabado sea de panel metálico, como las ya existentes, de modo que no se diferenciará la parte nueva de la antigua. El Concello entiende, por lo tanto, que el proyecto no ha conseguido que estos espacios cuenten con la "mayor congruencia posible con el entorno urbano residencial" y considera que la inclusión de elementos vegetales -que sí que fueron solicitados para subsanar otras deficiencias- no sirve para "justificar la adaptación del volumen principal" a la normativa actual.