María Casal comenzó el pasado mes de septiembre la universidad y, tras toda su etapa de enseñanza obligatoria y Bachillerato en su localidad natal, Sada, se enfrentó a la situación de trasladarse desde su domicilio, en Veigue, hasta el campus de Elviña, donde estudia Logopedia. Diariamente puede llegar a estar dos horas en el autobús en cada sentido, a la ida y a la vuelta. "Depende mucho del horario que me toque ese día y de si coincido con algún compañero que me pueda llevar en coche. Si es así, me despierto a las 7.30 para que me recojan a las 8.10 y llegar a la facultad a las nueve. Si ese día no coincido con ningún compañero, me despierto a las 6.45 para coger el bus de las 7.25, llegar al centro de Coruña sobre las 8.15 y coger el bus urbano del campus", explica.

Muchos de sus compañeros de instituto de Sada tienen que hacer la misma operación a diario y también conoce a profesores universitarios. Aún estudiando y sin trabajar no se plantea cambiar el domicilio familiar, pero preferiría vivir en la ciudad "sin duda". "Ahora pierdo mucho tiempo en el transporte publico, casi dos horas", lamenta.

La estudiante considera que con facilidades para llegar desde el área directamente hasta el campus se podría mejorar la situación de otros compañeros: "Beneficiaría a muchísima gente; como el tren, que pasa por la universidad y si pudiera parar allí mucha gente se ahorraría el tener que vivir en Coruña".