La simpatía que exhibió el grupo Belle and Sebastian durante su concierto del viernes en la playa de Riazor halló respuesta en el público, agradecido por los piropos que su líder, Stuart Murdoch, dedicó a la ciudad. El vocalista contó, entre otras cosas, que había subido a lo alto de la Torre de Hércules, admitió que el paisaje desde la playa era "precioso" y se dirigió al público con un " nenos" tras presentar a la banda. Al subir a una chica a bailar al escenario, Murdoch le preguntó su nombre. "¿Marisa?", se sorprendió al escucharla. "Este es un momento freaky, mi mujer se llama Marisa y ahora está en Escocia, espero que no nos esté viendo", bromeó.