El Ayuntamiento incumplió el pasado mes de julio el período medio de pago a proveedores en más de veinte días. Lejos de los 30 marcados por el Gobierno central, la administración local pagó a las empresas que tiene contratadas en 52,75 jornadas de media. El Ejecutivo municipal avanzó hace unas semanas que una factura pendiente desde diciembre por la recogida y tratamiento de basuras a Cespa, por tener el contrato ya vencido, es la causa del aumento de esta cifra, aunque debería volver a la normalidad, según el Concello, en agosto o septiembre, cuando se pague el recibo tras el acuerdo con el PSOE que permitió su aprobación por el pleno.

Pese a bajar en cinco días el período de pago registrado en junio, que quedó en 57, el Gobierno local deberá volver a estar dentro del límite de las 30 jornadas para poder gastar el superávit del año pasado, que llega casi a los 20 millones de euros. El Ministerio de Hacienda establece en el programa de inversiones financieramente sostenibles obras que pueden sufragarse con esta cuantía y que deberán consensuarse con el PSOE.