El Concello construirá un observatorio de aves en O Portiño, frente a las islas de San Pedro, destacadas por acoger una "interesante" comunidad de este tipo de animales. La caseta, de 75 metros y de madera, tendrá un coste aproximado de 15.000 euros, provenientes de los fondos europeos a través de Eidus Coruña, y estará lista en 2019, tras dos meses de obras desde que se adjudique.

Además de buscar la divulgación entre la población coruñesa, el Gobierno local destaca que se ha observado en los últimos años "un creciente desarrollo del turismo relacionado con la naturaleza en general y con la observación de aves en particular". El entorno ha notado este atractivo, por lo que la Concejalía de Medio Ambiente cree que esta infraestructura ayudará al "potencial" de la ciudad para estos visitantes.

Dentro de la caseta se instalará un panel interpretativo "donde se facilite información sobre las aves y la ecología del territorio" y se colocará señalización con recomendaciones de uso para los posibles usuarios. La ubicación del observatorio es la que, afirma el departamento municipal, se utiliza a día de hoy los interesados en la biodiversidad de las islas, así como buceadores o pescadores, que van a este punto a conocer el estado de la mar. Se trata de la ladera del monte de San Pedro, cerca del paseo marítimo y justo antes de llegar al local de la asociación Reto.

En la zona hay un aparcamiento que facilitará el acceso en coche pero, al estar al lado del paseo, también se podrá llegar en bicicleta o a pie de manera sencilla y la parada de bus cercana también ofrecerá la opción de trasladarse en autobús urbano. La empresa que se encargue de la obra, adecuará el camino hasta la caseta para que la pista peatonal sea accesible y tendrá una rampa de ingreso a la misma.

La caseta tendrá unas ventanas adaptadas a la observación y en su interior dispondrá de dos mesas y 30 sillas plegables para favorecer la flexibilidad de su uso. Además, tendrá un baño mixto, un almacén y un aula de trabajo. La adjudicataria de la obra deberá hacer que la estructura sea resistente a los temporales o malas condiciones meteorológicas y también contará con cerramientos resistentes para evitar actos vandálicos.

La actuación está enmarcada en la línea del Eidus de recuperación de espacios naturales, que contempla también una caseta de educación ambiental, mejoras en varias infraestructuras o retirada de especies invasoras. Antes de comenzar a conformar este proyecto se realizaron diversas consultas con los grupos Hábitat y Sociedad Gallega de Ornitología para poder adaptar la idea a las mejores condiciones de los expertos en la materia.