La línea 14, que conecta Os Rosales con O Castrillón, es una de las que más kilómetros recorre. Se pasea por la ciudad de una punta a otra, lo que provoca que también sea la línea con más pasajeros y más accidentes. El año pasado, según el Plan de Seguridad Vial de la Compañía de Tranvías, se registraron 55 siniestros en los autobuses con el número 14.

De los 465 accidentes que se produjeron en 2017, un 11% fue en la línea 14. La cifra aumentó con respecto al año anterior, 2016, cuando se contabilizaron 39 siniestros en estos autobuses. La Compañía de Tranvías explica que este dato se debe a que es una línea con mucha frecuencia, que atraviesa toda la ciudad y se mueve por zonas de mucho tráfico. Lo mismo ocurre con las líneas 4 y 11. La primera, que va desde la avenida de Hércules hasta el Barrio de las Flores, contó el año pasado 41 accidentes, tres más que en 2016. Mientras que la línea 11, que cubre la ruta entre As Lagoas y el centro comercial Marineda City, tuvo 38 siniestros.

La segunda línea en demanda, después de la 14, es la 6, que va de la avenida de Hércules al Barrio de las Flores. En estos autobuses se registraron 32 accidentes. Otra línea que ha ido ganando pasajeros es la Universitaria, en la que el año pasado se produjeron 23 siniestros.

Hay otras líneas de bus que apenas registran incidentes, como el Búho, que circula de madrugada. El año pasado solo hubo un accidente en estos autobuses. En la línea 33, que traslada a los empleados de la Compañía de Tranvías, hubo tres siniestros. En general, son los autobuses que atraviesan las zonas de Cuatro Caminos y plaza de Pontevedra, dos de los puntos más conflictivos de la ciudad, los que registran una mayor accidentalidad.

De todos los siniestros detectados el año pasado, un total de 465 sin contar los accidentes laborales, la mayoría no tuvo lesionados. Un total de 163 personas resultaron heridas mientras que los 302 restantes no tuvieron que lamentar daños por los accidentes. Aunque fueron menos accidentes que en 2016, cuando se contabilizaron 474, hubo más lesionados, un total de 22 más.

En su análisis, la Compañía de Tranvías también aclara qué tramos de edad cuentan con un mayor número de lesionados. El 45% de los heridos por un accidente de autobús supera los 60 años, mientras que el 40% tiene una edad entre 18 y 59 años. Los menores y las personas con movilidad reducida se encuentran entre los menos afectados. Además, la mayor parte de las lesiones se produce cuando el autobús está en marcha, aunque apenas hay diferencia entre los pasajeros que viajan de pie (33%) o sentados (25%).

Sobre las causas de los siniestros con lesiones, casi un 30% se produce por resbalones o tropiezos de los pasajeros mientras que un 22% es por frenazo del conductor, una situación que la Compañía de Tranvías prevé reducir al insistir a sus trabajadores en la necesidad de tener una conducción moderada durante todo el trayecto. El 56% de las caídas registradas en el vehículo se producen en la mitad del autobús, ya que es donde más personas se concentran habitualmente y, sobre todo, donde se colocan las personas que viajan de pie o que están a punto de llegar a su parada.