La Consellería de Infraestruturas supedita la creación de un consorcio de transporte que reúna a los concellos de la comarca a la conformación oficial del área metropolitana, un proceso en el que, de momento, no ha participado ni el Gobierno gallego ni el Partido Popular. El rechazo de la Xunta de Galicia a una entidad que gestione el transporte metropolitano está reflejado en la contestación de la alegación que presentó al plan de transporte metropolitano la mesa de alcaldes de la comarca en la que participan siete concellos. El departamento autonómico la desestima por no ajustarse a lo tratado, dice el informe, en el proyecto en exposición pública.

Infraestruturas defiende que el plan de transporte no entra a valorar la "herramientas" o "modelos de gestión o coordinación" del servicio y que, por tanto, tampoco le corresponde impulsar la creación de una "nueva estructura administrativa". En el caso "hipotético", explica la Xunta, de que los Ayuntamientos de la comarca lograran formar el área metropolitana, a través de una ley en el Parlamento gallego, y esta asumiese las competencias en transporte, el Gobierno autonómico le requeriría un plan de transporte, como hizo al de Vigo. Y en ese momento, añade, "se debería tomar una decisión sobre el modelo de gestión más adecuado". Ante tal escenario, la consellería concluye en el informe que "no tiene sentido elucubrar sobre las decisiones que podrá tomar, en el futuro, una entidad administrativa que ni siquiera existe a día de hoy".

En la respuesta a la alegación, de contenido técnico pero también político, justifica que el "éxito" de los acuerdos "multilaterales" del programa de transporte de la Xunta contrasta con el desacuerdo entre concellos que hay en Vigo y que ha impedido la puesta en marcha "efectiva" del área metropolitana viguesa.

El departamento autonómico reprocha a A Coruña y la comarca que no "acrediten" el impacto "positivo" del consorcio ni que se justifique "una mejora en la eficiencia en relación a la situación actual". Y es que la consellería defiende que su plan de transporte ya prevé la "coordinación de los servicios interurbano y urbano en los entornos de las ciudades" y que amplía el radio de acción de la comarca a un total de 17 municipios.

"Seguiremos adelante"

El Concello de A Coruña respondió ayer a la noticia remarcando que la conselleira, Ethel Vázquez, estaba citada este mismo mes con los alcaldes del área para explicarle el proyecto del consorcio al detalle y proponerle su adhesión. "Queríamos abrir un camino pero, antes de reunirse, envía una 'carta' para adelantar que su respuesta es no, como siempre. Ya no sorprende a nadie", denunció el concejal de Mobilidade, Daniel Díaz Grandío, que apunta que la mesa de regidores seguirá trabajando de manera conjunta. "La mejora de la calidad de vida de los vecinos no se para porque la conselleira lo diga. Seguiremos adelante", finalizó.

Las reacciones del resto de municipios que apoyan el consorcio también surgieron en la tarde de ayer, nada más conocerse el rechazo de la Xunta. Desde Culleredo, el alcalde, José Ramón Rioboo, considera necesario que se conforme la entidad en la "primera corona" de la comarca para que haya, en su territorio, más frecuencias en el ámbito rural y que exista una "cobertura total" del mismo. También piden, desde Bergondo, paliar el "déficit" de comunicaciones en el interior del municipio. Fuentes del Concello están seguros de que el consorcio es la "fórmula más adecuada" aunque tienden la mano a la Xunta si pretenden mejorar las rutas en el corto plazo.

Desde Cambre son más tajantes y dicen no entender la postura del Gobierno autonómico después de haber aunado, desde la propia comarca, a "todos los actores implicados". "No nos coge por sorpresa ya que la Xunta acostumbra a tratar de este modo a los Concellos del área metropolitana y a Cambre en particular", reprochan.

En Betanzos reclaman, para comenzar, la creación de nuevas frecuencias con servicios a los polígonos industriales y una mejor conexión de la localidad con su comarca a través de líneas directas con los concellos limítrofes. "Todo esto al margen del órgano desde el que se pueda gestionar, ya que para nosotros prima más la mejora del servicio de cara al vecino que el órgano de gestión", explican fuentes municipales, aunque asumen su apoyo la creación de un consorcio por considerar que este puede "defender los intereses de sus vecinos".