Las obras de reforma de la avenida Alfonso Molina comenzarán por la pasarela peatonal de Pedralonga, según explicó ayer el alcalde, Xulio Ferreiro. Será así porque es "la intervención más importante para la seguridad de las personas", abundó el regidor municipal que, ayer, aseguró que el proyecto estará acabado "de inmediato".

La Delegación del Gobierno, sin embargo, confirmó ayer a este diario que compartirá con el Concello este plan de actuación, aunque prevé que el proyecto definitivo esté finalizado antes de que se acabe este año. Es decir en este último trimestre. Eso implica que las obras tendrían que salir todavía a concurso y que habría que esperar unos meses hasta autorizar la adjudicación. El comienzo de los trabajos en la pasarela de Pedralonga no está previsto, por lo tanto, hasta el próximo año.

El alcalde confirmó ayer que mantenían reuniones con el Ministerio de Fomento sobre la reforma de Alfonso Molina, que es mucho más amplia que la pasarela peatonal de Pedralonga, que unirá el barrio con Palavea. Y es que, con el anterior Ejecutivo, el Gobierno local no había podido ver el proyecto completo de remodelación de esta arteria de entrada y salida de la ciudad.

Fomento informó el pasado mes de marzo de que había aprobado el proyecto definitivo para la avenida, tras concluir el trámite de respuesta a las alegaciones de otras administraciones como la Dirección Xeral de Patrimonio y Adif. También del Concello, que solicitó, entre otras cuestiones, que la pasarela de Pedralonga figurase como actuación "preferente" como demanda vecinal y que se concretasen con mayor detalle las obras previstas para la protección ambiental de la vía, además de exigir mayores garantías para paliar el efecto de los gases y el ruido. Para entonces, el Ministerio de Fomento decidió trocear la reforma en tres proyectos diferentes, cada uno con sus plazos y su presupuesto.

Con el proyecto definitivo, el presupuesto de las tres actuaciones se mantuvo en 19,1 millones de euros, casi del doble de lo previsto en 2014, cuando se mostró a los vecinos y a las administraciones el primer diseño. Antes de la ejecución de las obras, el Concello tendrá que realizar expropiaciones en los márgenes de la avenida.