"Hasta ahora nunca hubo un informe negativo de tarifas", afirmó el alcalde, Xulio Ferreiro, sobre el análisis que tendrá que realizar un órgano de la Xunta, la Comisión de prezos de Galicia, para avalar la bajada del billete que pretenden aplicar en los autobuses. La comisión está presidida por la directora xeral de Comercio y de ella forman parte varios departamentos de la Xunta y representantes de las Cámaras de Comercio, la Confederación de Empresarios de Galicia, asociaciones de consumidores y sindicatos. Una de sus funciones es autorizar las tarifas del transporte público (buses, taxis). Se reúne dos veces al año en función del número de expedientes. El Concello ha de enviarle la descripción del servicio, la estructura de los costes, la descripción del proceso de comercialización, la tarifa antigua y la que se pretende implantar y la justificación "del alza" que se plantee. Fuentes de la Dirección Xeral de Comercio explican que la propuesta debe pasar por Pleno aunque hasta el momento en A Coruña es una decisión que ha tomado siempre la junta de gobierno. Pendiente de aprobación, el expediente aún no ha llegado y en el momento que se reciba "se analizará la procedencia o no de su tramitación ante la comisión de precios". "En ningún caso regula los acuerdos entre concellos y empresa", afirman.