El cocinero César Gallego, institución de la gastronomía coruñesa, falleció ayer a los 92 años. Conocido por muchos por ser fundador del restaurante El Coral, que cerró el año pasado, deja una huella imborrable en la cocina de la ciudad, en la que también tiene un sitio importante su hijo, Pablo Gallego. El entierro será hoy, a las 12.00 horas, en el cementerio de San Amaro y el funeral se celebrará el lunes, a las 20.00 horas, en la iglesia de San Nicolás.

Dedicó toda su vida a la hostelería. Empezó a trabajar como camarero, "por obligación" como él mismo reconoció a este diario en una entrevista en 2017. No quería estudiar así que siguió los pasos de su padre y se puso detrás de la barra. Fue mejorando hasta llegar a ser nombrado encargado, y de ahí a patrón. Así nació El Coral, marisquería abierta en 1954 y situada en el callejón de la Estacada. Apareció, incluso, en las páginas de la Guía Michelin. Pero como todo lo bueno se acaba, Gallego dijo adiós a su restaurante, que cerró en noviembre del año pasado, tras su jubilación.

En la pasada edición del Fórum Gastronómico, el reconocido cocinero recibió un Premio Picadillo que sirvió como homenaje a su larga trayectoria entre los fogones. Aprovechó la ocasión para hacer un guiño a la nueva gastronomía, más innovadora que hace una década. En palabras a LA OPINIÓN, Gallego aseguró que "los cocineros, aunque no se ven en el restaurante, tienen mucho mérito", ahora también se dedican a "decorar los platos". "Tienen mucha imaginación", comentó.

Recuerdos en las redes sociales

Las redes sociales se llenaron ayer de mensajes de cariño y admiración a César Gallego. Su hijo, Pablo Gallego, que tiene un restaurante en el número 4 de la calle Troncoso, compartió en Facebook una fotografía junto a la escribió: "Un padre, un maestro y mi mejor amigo sin duda". Una despedida llena de emoción pero también de adoración hacia su progenitor.

La asociación Coruña Cociña también llora el adiós a César Gallego. "Es un día triste para la hostelería coruñesa", compartieron a través de las redes sociales, a la vez que definieron al cocinero como "un grande, un luchador y un referente".

El restaurante A Mundiña hizo su pequeño homenaje a Gallego en Twitter. "Él fue de los primeros en hacer grande la sala en A Coruña". Es una de las frases que se puede leer en el perfil, en el que también se habla de "un referente" de la gastronomía, un mundo que no lo olvidará.

Las huellas que ha dejado a su paso también han marcado el camino de los políticos. El alcalde, Xulio Ferreiro, apuntó que "la grandeza del que se va se mide en los recuerdos que deja". Desvela que recordará a este cocinero por "los olores, los sabores y el arte en la cocina". "Pero aún más por el exquisito trato de una persona a la que descubrí tras muchos años sentado en su mesa", añadió, echando la vista atrás.

También el edil de Turismo, Alberto Lema, escribió en internet que ha fallecido "un maestro" de la cocina mientras que la candidata a la Alcaldía por el PP, Beatriz Mato, dio el pésame a la familia Gallego y manifestó que "se va uno de los referentes gastronómicos" de la ciudad.