La plaza de Ourense cuenta desde ayer con una señal en el cruce semafórico en dirección de entrada a la ciudad que prohíbe efectuar el cambio de sentido. Los vehículos que procedan de la avenida de Linares Rivas y quieran tomar la dirección contraria deberán desviarse por la calle Picavia y llegar a la plaza de Lugo y la calle Padre Feijóo para regresar a la plaza de Ourense. La medida afecta de forma especial a los taxistas que giraban en este lugar para dirigirse a la parada de ese punto.