El área urbana de A Coruña cuenta con 2.000 edificios, solares u otro tipo de espacios que carecen de uso y que se reparten por todo el municipio en el caso de la ciudad, aunque con las excepciones de los barrios del Ensanche, O Ventorrillo, Barrio de las Flores y polígono de Elviña. Estos datos forman parte de los resultados del curso Empty Coruña?, desarrollado por la Universidade da Coruña el pasado verano, y se dieron a conocer ayer como apertura de las jornadas sobre renovación urbana que organizan este fin de semana la entidad académica y el Concello.

El sociólogo Manuel García Docampo, miembro del equipo que integró esta investigación -en la que participaron una decena de profesores y 25 alumnos- explicó ayer que la razón por la que no existen espacios vacíos en determinados barrios se debe a que hay "calidades urbanas diferentes en la ciudad" y que además en algunas zonas se produce "un proceso de colmatación intensa que hace que no queden esos espacios".

El arquitecto Plácido Lizancos advirtió además de que la investigación iniciada el pasado verano debe continuar porque en las zonas de la ciudad donde no fueron localizados espacios vacíos pueden aparecer sorpresas.

"Probablemente detrás de esas fachadas que parecen vivas haya problemas de gentrificación, envejecimiento, vaciado, vivienda hacinada? la crisis provocó muchas cosas", advirtió Lizancos, quien explicó que la recesión económica generó en el área metropolitana todo tipo de espacios desocupados, desde polígonos industriales enteros como el de Vío a solares en medio del casco urbano o a edificios abandonados.

De los dos millares de lugares vacíos identificados en la comarca por la investigación, 1.300 fueron ubicados en el mapa creado durante el curso de verano. Las construcciones sin cubierta sumaron 149, mientras que las tramas urbanas vacías fueron 251 y los edificios inacabados 54. También se localizaron 185 construcciones en las que solo se realizaron algunas fases, además de 66 edificios terminados que no fueron usados nunca y otros 460 ocupados en su día y hoy están abandonados. La última categoría son los edificios en ruina parcial, de los que el estudio identificó 188.

Lizancos señaló sobre esa última categoría que en el barrio de la Pescadería existen edificios en estado ruinoso de modo forzoso debido a que sus propietarios no los mantienen para causar su derrumbe y dejar paso a la construcción de un nuevo inmueble. En cuanto a la solución para el problema de los espacios vacíos, este arquitecto consideró que debe ser un compendio de diferentes actuaciones, desde la política a la urbanística y la sociológica.

Para ofrecer una visión sobre cómo se extiende esta situación por la ciudad, Lizancos mencionó que la Universidade tiene cuatro edificios vacíos, aunque la vicerrectora de Estudantes, Margarita Amor aclaró que se están elaborando proyectos para todos los espacios desocupados pero que la institución está limitada por su escaso presupuesto. También citó Lizancos los edificios municipales sin uso, como los bajos del Millennium y la antigua cafetería Remanso, al tiempo que reconoció los esfuerzos del Concello por recuperarlos.

En cuanto a los casos más emblemáticos en A Coruña, además del cine Avenida, que destacó especialmente porque su propietario es Abanca, el director de Empty Coruña? citó el de Palexco y Los Cantones Village, al que calificó de "oportunidad perdida para la ciudad por su posición", además del tranvía turístico, del que dijo que es uno de los "proyectos curiosísimos" que demuestran "que la ciudad que se estaba diseñando era una ensoñación demasiado onírica".

Otro de los miembros del equipo investigador, el arquitecto suizo Hans Rufer, expresó su deseo de que el trabajo realizado "impactase al mayor número de personas posible" e "identificar por lo menos un espacio en el que pudiéramos dar acceso a la vivienda a una persona".

Preguntado por qué medida apostaría por tomar para tratar de solucionar el problema de los espacios vacíos, el concejal de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, contestó que la solución "no pasa por la intervención particular" y que la actuación municipal más importante en este campo ha sido la modificación de la ordenanza de rehabilitación para conceder ayudas de acuerdo con la renta de las personas, ya que evita su expulsión de los barrios más céntricos.