El Concello pretende que la ciudadanía reclame o haga sugerencias de manera más moderna y eficaz y, para ello, presentará una aplicación para teléfonos móviles en el primer trimestre del año. La plataforma en el que se presentan a día de hoy las quejas ciudadanas data de hace doce años, por lo que un informe del Servicio de Innovación e Desenvolvemento Tecnolóxico sugiere una "modernización o actualización tecnológica" de la manera que tienen los vecinos para comunicarse con el Gobierno local con el objetivo de disponer de "más y mejor información sobre los problemas que detectan". Los vecinos presentaron el año pasado 13.480 sugerencias y quejas, un 23% más que en 2016.

La puesta en marcha de la nueva aplicación se incluyó en las cuentas municipales de 2017 tras resultar ganadora por votación de los coruñeses en los primeros presupuestos participativos. A día de hoy, el Concello asegura que está en fase de "ejecución".

La Concejalía de Participación, que dirige Claudia Delso, anunció ayer que lleva más de un año trabajando en esta herramienta digital que, según las peticiones de los propios funcionarios, incluiría información geolocalizada de las sugerencias de los coruñeses y a tiempo real, así como una integración de otras entidades, como las empresas concesionarias. La edil avanza que cuando presenten la aplicación también se anunciará la derivación de algunas de las peticiones a estas compañías, encargadas de los servicios públicos pero que no entran en el organigrama interno de sugerencias y reclamaciones del Concello. El informe municipal afirma que incluir a las adjudicatarias en el sistema trasversal municipal sería "especialmente relevante para descongestionar el sistema". Además, propone que los pliegos de condiciones futuros incluyan la obligatoriedad de estar dentro del circuito de quejas o entregar información al respecto de aquellas que tengan que ver con su trabajo diario mediante protocolos informáticos.

El documento sobre la actualización del sistema también propone cambios del marco normativo para revisar, por ejemplo, el concepto de "persona interesada", que en el reglamento orgánico especifica que deben ser personas empadronadas en A Coruña o que tengan "una o varias relaciones tributarias periódicas" con el Ayuntamiento. El jefe del servicio de Innovación apunta a que la propia normativa admite que "podrá ser objeto de sucesivas mejoras" por lo que, tras 14 años desde su aprobación, "sin que nada de esto sucediese", recrimina, propone revisar su articulado. Los temas por lo que se puede reclamar o la necesidad de un registro especial son otras de las carencias que observa en el reglamento.