El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, reconoció esta mañana que las condiciones de tráfico en la ciudad derivadas de la construcción del túnel de la Marina, con un ramal hacia O Parrote y otro hacia As Atochas y Monte Alto, hacen "muy difícil" la articulación de soluciones cuando se producen atascos por problemas ocurridos en esta infraestructura, como ocurrió ayer, cuando hubo retenciones y largas colas de vehículos durante más de seis horas. "Una vez que se construye el tritúnel, todo el tráfico de la ciudad queda condicionado por esa obra. Es muy difícil encontrar otras soluciones porque el túnel de Juana de Vega tiene la capacidad que tiene para absorber tráfico", explicó Ferreiro.

El regidor admite que los técnicos municipales buscarán "alternativas" pese a la dificultad para desviar el tráfico sin ocasionar problemas de circulación en el resto de la ciudad, aunque aseguró que una posible solución, la habilitación del tráfico por la superficie de la Marina, no es aconsejable: "Creo que la Marina está asumida como un espacio mayoritariamente peatonal con poco tráfico. Desviar el tráfico por la Marina en un momento así los técnicos no lo recomiendan por los problemas de seguridad que pueden crear, por el colapso de la vía.