Una de las dudas que plantea a los licitadores el proyecto de la nueva estación de autobuses que se integrará en la intermodal coruñesa, cuya redacción la Xunta prevé adjudicar el próximo mes de abril, es la conexión entre las dos infraestructuras, como denotan algunas de las preguntas remitidas a la Secretaría Xeral Técnica de la Consellería por los interesados en presentar ofertas durante el proceso de licitación. Este departamento autonómico ha recibido ocho consultas y dos aluden a la interconexión de los edificios. La Xunta espera recibir propuestas que "ofrezcan alternativas para la conexión" de la estación de buses con la del tren, pero sin detallar cómo debe articularse esa integración. Ante la falta de información sobre el proyecto de Adif para adaptar la terminal a la llegada del AVE, como señala una consulta, Infraestruturas ha pedido al organismo ferroviario que se la facilite a los interesados.
"El diseño del edificio de la estación de autobuses debe garantizar la interconexión con el edificio de la estación de trenes", responde la Secretaría Xeral Técnica a otra pregunta respecto a la separación mínima que debe haber entre las dos infraestructuras, definida en seis metros en el proyecto básico anterior, en el que la Xunta y el Ayuntamiento no llegar a acuerdos; en este punto no debe tenerse en cuenta dicha separación mínima, según establece el nuevo documento de bases.
Otra cuestión planteada por los licitadores se refiere al número de dársenas, reducido de 30 a 20 respecto al proyecto anterior, y las superficies de espacios, para lo que la Xunta apuesta por "optimizar el diseño de los espacios comunes dotándolos de funcionalidad" para los usuarios.
También preguntan por los límites de intervención del proyecto, ya que entre la futura terminal de autobuses y la ronda de Outeiro hay un edificio de correos con aparcamiento descubierto a cota inferior desde la avenida de A Sardiñeira. La respuesta que obtienen es que los trabajos proyectados no tienen por qué ceñirse a la parcela definida por el plan general, ya que "el ámbito de actuación debe finalizar "en la conexión con la pasarela peatonal" integrada en el proyecto de Adif.
Otras respuestas permiten la presentación de propuestas de accesos diferentes a las que indica el proyecto básico y confirman que las ofertas deben estar firmadas por dos coautores: un arquitecto y un ingeniero de caminos.
Las obras de la nueva estación de autobuses integrada en la intermodal no comenzarán hasta finales de 2022 o principios de 2023, según estimó a finales de noviembre la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, al informar de la apertura de la licitación de la redacción del proyecto por un valor de 375.000 euros. La Xunta calcula un plazo de un año a partir de su previsible adjudicación en abril próximo. Ya en ese mes de 2020 comenzaría la tramitación urbanística para cambiar el plan general, de la que Vázquez dijo que tendrá una duración máxima de 18 meses, que si se cumple, estaría terminada en octubre de 2021. El plazo de licitación de las obras sería de seis meses, por lo que se adjudicarían entre febrero y marzo de 2022. La conselleira dio como inicio de los trabajos 2022 o 2023.
