Los tres grupos de la oposición municipal -PP, PSOE y BNG- optaron ayer por abstenerse en la votación sobre la recalificación de La Solana en la comisión municipal de Rexeneración Urbana, aunque esta es la política que siguen habitualmente con los asuntos que posteriormente deben pasar por el pleno. Esto implica que la sesión que se celebrará el próximo lunes, en la que se propondrá la aprobación definitiva del cambio urbanístico del complejo deportivo, fijará la posición de estas formaciones.

En la aprobación inicial, los socialistas respaldaron la propuesta del Gobierno local y los populares se abstuvieron, mientras que la concejal nacionalista, Avia Veira, no pudo asistir a aquel pleno. El BNG mantiene una posición crítica sobre esta iniciativa de Marea Atlántica, ya que, pese a haber admitido sus alegaciones a esta recalificación, descarta promoverla también para el hotel Finisterre porque considera que es preciso hacerla a través de la modificación del Plan Especial de Protección y Reforma Interior del casco histórico, que pospone para el futuro.

Los nacionalistas estiman que el Gobierno local podría haber iniciado ese cambio urbanístico al mismo tiempo que el de La Solana y destacan que todavía no se ha dado ningún paso para alcanzar ese objetivo.