El Ministerio de Defensa ha dado su visto bueno al parque de nuevas tecnologías propuesto por la Universidade da Coruña en la fábrica de armas. El encuentro celebrado ayer en Madrid, en el que también participó el Concello, puso la primera piedra para darle un volantazo a las instalaciones, una vez que se ha confirmado la retirada de la concesión a Hércules de Armamento por impago del canon. Las administraciones central, local y académica pondrán en marcha "de forma inmediata" un grupo de trabajo para definir jurídicamente el proyecto y la fórmula de cesión del complejo y los terrenos. La idea es trabajar entre seis y doce meses para cerrar esta cuestión para que la llamada Ciudad de las TIC pueda ponerse en marcha en tres años.

El rector, Julio Abalde, relató tras la reunión que el secretario de Estado de Defensa, Ángel Olivares, se mostró "muy receptivo a la propuesta" por lo que quiso agradecerle su "predisposición para la fábrica de armas sea de nuevo una instalación efectiva y permita desarrollar el tejido industrial de la comarca". Además de Abalde y Olivares, se sentaron en la mesa el alcalde, Xulio Ferreiro; el presidente del antiguo comité de empresa, Roberto Teijido; la delegada del Gobierno, Pilar López-Riobóo; el concejal de Economía Social, Alberto Lema; y el diputado socialista, Ricardo García Mira, que ha ejercido de interlocutor con Defensa.

Todos señalan que el trabajo comenzará lo antes posible, con el objetivo de articular la fundación del proyecto, para el que ya se barajan a priori algunas fórmulas por analizar como que la concesión sea compartida entre UDC y Concello o que se forme un ente instrumental con la participación de ambas instituciones y abierta a la participación de la Diputación o de alguna otra administración "y poder desarrollar conjuntamente este proyecto". Así lo explica Xulio Ferreiro que entiende que el parque "encaja en el modelo económico" que tiene el Ayuntamiento, "de apostar por un sector innovador y sostenible en lo social y lo ambiental, susceptible de traer inversiones para la ciudad, atractivo para empresas de fuera que puedan ver que este ecosistema es un lugar bueno para instalarse".

Abalde explicó que se comprometen a buscar la forma de que los trabajadores de la fábrica tengan participación y espera que el complejo se convierta en "un referente" y juegue un papel importante "en el desarrollo de Galicia". La Ciudad de las TIC surgió a iniciativa de la Universidade da Coruña con la colaboración del Clúster TIC - que agrupa a empresas, asociaciones empresariales o profesionales, colegios y otros agentes del sector de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones- por la demanda de las empresas del sector, que reconocen una necesidad "imperiosa" de suelo, de contar con un polo de innovación en el que estuviese presente la UDC. Así, en los terrenos se centralizarían las sociedades del sector interesadas en compartir un espacio común, así como iniciativas de conocimiento y emprendedoras de la institución académica.

Según explicaron tras la reunión el Concello, la UDC y Defensa en una nota conjunta, la Ciudad de las TIC permitirá "apoyar la industrialización en un territorio que pierde peso industrial, retener el talento local y atraer talento internacional, así como potenciar un efecto de dinamización de la innovación de otros sectores como el textil, el logístico, el portuario y el alimentario". El rector concibe el plan más allá de la ciudad y la comarca, porque "nace con la idea de colaborar y trabajar con los otros polos TIC que hay en Galicia, en Vigo, Ourense, Santiago y el polo aeronáutico de Lugo".

Otra de las cuestiones que queda por definir es la participación de la Xunta. "Creo que solo falta su compromiso, que creo que se va a dar, para que todos estemos alineados y que esto pueda salir adelante en el menor tiempo posible", afirmó ayer Ferreiro. Ya ha habido conversaciones al respecto y puede ser el Igape el que canalice la participación de la Administración autonómica. El diputado García Mira explicó, por su parte, que la reunión de esta mañana es también el culmen de una serie de encuentros que él y los ex trabajadores han mantenido con el Ministerio desde agosto. Para el diputado, es "un gran ejemplo de cómo la acción desde las bases, la acción sindical" es capaz de dinamizar "la acción política".