Era 1990 cuando Héroes del Silencio lanzaba a las masas su segundo álbum de estudio, Senderos de traición, con un sencillo que revolucionaba el panorama del rock nacional. Después de dos grabaciones con las que habían dado sus primeros pasos, el grupo de Enrique Bunbury se ponía las pilas con Entre dos tierras, una de las piedras sobre las que se construiría su futura consolidación como banda, y que se coló con fuerza en muchos hogares españoles. El de Javier De Pedro, cantante de Iberia Sumergida, fue una de esas casas. El músico, que ejerce hoy de Bunbury a tiempo parcial, tuvo en el tema su primer flechazo por los aragoneses, a los que homenajea desde más de una década como líder de su banda tributo.

"Recuerdo que los estuve escuchando desde entonces y hasta el 96. Creo que fue la guitarra y la voz de Enrique lo que me marcó, porque lo veía diferente", rememora el artista, que aborda este viernes en A Coruña la primera parada de su gira de 2019. La formación ofrecerá su directo en el Playa Club, donde tocará a partir de las 23.00 horas. Los nostálgicos de los 80 podrán revivir entonces temas de la banda tan icónicos como Sangre hirviendo y Espuma de Venus, que sonarán como parte del recorrido que harán por su discografía .

El estanque, La carta y Sirena varada son también favoritas para entrar en el repertorio, en el que destacan como las canciones más solicitadas a la hora de subir a las tablas. Junto a ellas, el grupo interpretará algún tema menos conocido para los seguidores más exigentes, a los que se preocupa especialmente de entusiasmar. "Está el fan rebuscado que siempre quiere alguna rareza. Pero si contentamos a ese, contentar a los demás ya es más fácil", dice entre risas el músico, que saldrá a escena dispuesto a "convencer al público gallego".

En la comunidad, confiesa, todavía tienen margen de trabajo, porque no han estado "muchas veces". El gusto que parece haber por las bandas tributo, y que se demostraba el pasado diciembre en la ciudad con una agenda cargada de homenajes, les da sin embargo fuerzas para la tarea, que emprenden con la misma energía con la que contaban en sus inicios hace 12 años. "Son más de 500 conciertos, pero las ganas todavía están ahí. La diferencia es que al principio éramos tremendamente malos, y ahora lo somos menos", bromea De Pedro, que se decidía a formar el grupo tras la gira de reencuentro de Héroes del Silencio.

En 2007, más de una década después de su separación definitiva, los aragoneses volvían a unir sus talentos con un abanico de actuaciones por España y Latinoamérica, a las que el cantante no quiso faltar. "Estuve en tres de los cuatro conciertos que dieron aquí. Y la verdad es que hubiese dado igual que no hubiesen hecho nada en ellos. Verlos juntos es algo que muchos queríamos que sucediera, y ahora ya podemos morir tranquilos", dice el músico.

El proyecto echó a andar "como un hobby", pero con el tiempo "fue sumando". Antiguos miembros de la formación original, como el batería Pedro Adreu, el guitarrista Alan Boguslavky y el pianista Copi Corellano acabaron dando su visto bueno a los directos de la banda, que llegó a tocar con ellos en diversas ocasiones. "Al principio no te lo crees. Las noches anteriores probablemente no dormí, porque al final es el sentido de todo esto. Tocar con ellos es acercarte más a lo que fue tu afición", afirma el artista, que señala como uno de los retos más complejos para Iberia Sumergida el "transmitir de manera natural" la "magia" de sus Héroes.

Sobre el escenario, el grupo trata siempre de "ser exacto", pero "sin caer en el ridículo de aprenderse un guion y hacer lo mismo" que la formación a la que homenajean. La calidad es la meta más importante para una agrupación que se enfrenta a un panorama congestionado por las bandas tributo, que cuentan con una actividad intensa en los últimos años. "La gente se lanza a esto porque cree que es fácil construir un set list con canciones que ya están hechas, pero luego no es tan sencillo. Al final, se quedan las que hacen una cosa profesional", apunta el cantante, que continuará su gira nacional tras A Coruña. Después de su actuación este viernes, el grupo pasará por León, Valladolid, Oviedo y Zaragoza, con otras dos paradas en Burgos y Pamplona durante abril.