Los Bomberos comenzarán en breve la instalación de 50 detectores de humos en viviendas de personas vulnerables, tanto mayores que viven solos como dependientes o con movilidad reducida que estarán conectados con el parque de A Grela para que puedan actuar sin necesidad de que reciban una llamada de emergencia. Se trata de la segunda fase de este programa, a través del que ya fueron colocados un centenar de estos dispositivos el año pasado. A estos domicilios se tuvieron que trasladar los efectivos solo siete veces durante todo 2018 y la mayor parte para cuestiones leves, relacionadas con "descuidos" como dejar una olla al fuego.

La elección de los vecinos que forman parte de esta iniciativa depende de la Concejalía de Xustiza Social y de las entidades sociosanitarias que trabajan a diario con estos colectivos, aunque fuentes municipales animan a cualquier persona que esté interesada a que se pongan en contacto con el servicio de Bomberos para solicitarlo. El programa cuenta con la colaboración de la firma irlandesa E Electronics y está impulsado por la Concejalía de Seguridad Ciudadana. "En el momento en que se detecta la presencia de humo se recibe un aviso en la centralita de bomberos, que se pone en comunicación con la persona de referencia y, si esta no contesta, se actúa inmediatamente", explica la responsable del departamento Rocío Fraga, que destaca que personas mayores viviendo solas es una situación "cada vez más habitual" en la ciudad.