El Concello otorgó el año pasado a través de la Renta Social Municipal un total de 404 ayudas, lo que supone un incremento del 25% con respecto a 2017, cuando se alcanzaron los 323 beneficiarios.

La inversión del Gobierno local en esta medida que cubre las necesidades básicas de aquellos que se encuentran en situación de vulnerabilidad social fue de más de un millón de euros, lo que permitió pasar de 188 prestaciones activas a un total de 318. La concejala de Xustiza Social, Silvia Cameán, señala que "los nuevos procedimientos de tramitación mejoraron de forma notable los tiempos de espera para la concesión de rentas sociales".

Desde su implantación hace dos años, la Renta Social Municipal concedió 506 prestaciones para unidades de convivencia en la ciudad. "Los datos destacan el buen funcionamiento tanto de la prestación económica como de su tramitación", detalla la edil.

Además, el Gobierno loca puso en marcha un procedimiento para mejorar, de forma continuada, estas ayudas mediante la realización de reuniones con beneficiarios de la prestación y trabajadores municipales. "A través de su experiencia daremos los pasos necesarios para su mejora y la siguiente acción será llevar el asunto al Consello Local de Inclusión", explicó Silvia Cameán.