Uno de los puntos incluidos en el acuerdo que puso fin a la mediación para resolver el conflicto del edificio Fenosa fue propuesto por la comunidad de propietarios de las viviendas y locales con el fin de que la situación por la que pasaron durante dos décadas pueda volver a repetirse. Según han manifestado a lo largo del conflicto, compraron los pisos sin conocer el riesgo que ello suponía por la presentación de la demanda, de forma que a lo largo de este tiempo se vieron sumidos en una inseguridad jurídica.

Tanto el Concello como el demandante expresaron su conformidad con esta preocupación, por lo que el primero se comprometió a aprobar un Protocolo de Buenas Prácticas Urbanísticas que trataría de evitar un nuevo caso similar a este.

Ese documento, cuyo texto también figura entre los acuerdos adoptados durante la mediación entre las tres partes, contiene medidas que pretenden garantizar la protección de quienes vayan a adquirir una propiedad inmobiliaria, entre las que figura que el Concello proporcione información actualizada y permanente sobre la situación de las promociones que lleven a cabo las empresas.

Otra de las iniciativas exigidas es que se inscriban en el Registro de la Propiedad las actuaciones administrativas y jurisdiccionales que se realicen en este campo, así como que se publiquen en el Boletín Oficial de la Provincia y en la página web municipal, de forma que los afectados puedan tener conocimiento inmediato de la situación en la que se encuentran las propiedades que proyectan comprar. El protocolo incorpora además medidas que intentan mejorar los servicios públicos y las decisiones tomadas por las administraciones, la primera de las cuales es un plan de inspección urbanística que tratará de comprobar que los edificios se ajustan a la legalidad y a la que se suma el incremento de la calidad de los servicios y la mejora de la tramitación de los recursos administrativos.

En el terreno de la responsabilidad, el protocolo incluye el ejercicio de la acción de regreso, de forma que los propietarios perjudicados por la acción de promotores puedan reclamar su condena, así como la de repetición, de forma que si los compradores perdieran sus propiedades, sean compensados por los autores de los hechos que les causó este perjuicio.