El juzgado suspendió ayer, por segunda vez y en esta ocasión sin nueva fecha, el desalojo del número 5 de la calle Paz. El pasado jueves lo hizo porque había una menor en el inmueble y esta porque el abogado de los habitantes del inmueble, Antonio Vázquez, presentó un escrito en el juzgado alertando de que "no se habían respetado" algunos puntos del procedimiento. Y es que este desahucio se produce porque la Sareb -el llamado banco malo- ha solicitado la ejecución de la hipoteca por el crédito que había contraído la constructora con una entidad bancaria y que, finalmente, no pagó. Vázquez asegura que no se les ha permitido a los habitantes del inmueble presentar alegaciones durante un plazo de diez días, tal y como marca la legislación. "Después de este plazo, se tiene que celebrar una vista para que el juez decida si las personas que están en la vivienda tienen que ser desalojadas o no. Si finalmente es que sí, tienen que darles un plazo no inferior a un mes para que se vayan voluntariamente", comentó ayer el letrado de los residentes en el edificio.
