La Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica da Coruña eligió ayer a Celsa Díaz Cabanela como Republicana de Honra de 2019 al imponerse en la votación a los otros tres candidatos a esta distinción. El jurado tuvo en cuenta que Celsa fue detenida por primera vez en 1974 por ser militante de las Xuventudes Comunistas cuando solo tenía dieciséis años, tras lo que fue encarcelada en la prisión provincial, donde volvió a ingresar al año siguiente.

Fue la única presa política de la cárcel coruñesa, donde se la internó con las reclusas comunes y trató de seguir estudiando, aunque al ser expedientada no pudo continuar su actividad académica hasta la promulgación de la Ley de Amnistía Política de 1976.