Los operarios de las obras para rehabilitar tres naves de la antigua Comandancia de Obras encontraron el lunes restos de una muralla antigua de la ciudad en subsuelo cercano a las edificaciones. La Xunta, a través de un técnico de Patrimonio, ha ordenado paralizar los trabajos de saneamiento que se realizaban en ese lugar de manera provisional. Según la Delegación del Gobierno, restaban los últimos tramos de tuberías para conectar a la red pública situados fuera de la zona de intervención de urbanización. El lugar afectado está en la zona más cercana al mar, en la trasera de los edificios reformados. Portavoces de Fomento -responsable de la contratación de la obra- afirman que se mantiene el plazo para finalizar el proyecto a final de este verano ya que se puede avanzar en otras partes. Ayer, los operarios trabajaban en el suministro eléctrico, abriendo una zanja entre las dos naves de mayor tamaño, y fuentes de la empresa concesionaria aseguraban que quedan aún muchas labores que asumir sin tener que intervenir en la zona donde se encontraron los restos arqueológicos.

El Concello explicó ayer que la Xunta solicitó un informe por escrito que ya se está elaborando para que sea la administración autonómica la que exponga cómo proceder la continuación de las obras. La Delegación del Gobierno ratificó que los técnicos están ya trabajando, según las "directrices" marcadas por Xunta y por el propio arqueólogo municipal, para obtener autorización para acabar la obra.

El proyecto inicial ya contemplaba la posibilidad de encontrar restos de algunas de las murallas que rodearon la ciudad en los últimos siglos aunque, explican desde la concesionaria, hasta que no se excava sobre el terreno es muy difícil saber con exactitud por dónde pasan los antiguos adoquines. El resto de muralla encontrado, según fuentes del Ministerio de Fomento, está protegida como Bien de Interés Cultural (BIC).

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Otro ministerio, el de Defensa, realizó en octubre de 2016 un estudio sobre los vestigios arqueológicos en todo el área de A Maestranza con el fin de poder prever los condicionantes que suponían los restos en el subsuelo a la hora de subastar tres parcelas de su propiedad en la zona. En este estudio se puede observar como, en la mitad de la parcela donde se ubicaba la antigua Comandancia de Obras se habría ubicado una fortificación que data de comienzos del siglo XVIII y que la recorre hasta el lugar más cercano al mar.