La Orquesta Sinfónica de Galicia interpretó ayer en el Palacio de la Ópera las obras Concierto para violín y orquesta en re mayor, op. 77, de Johannes Brahms, y la Sinfonía nº7 en la mayor, op. 92, de Beethoven, en el concierto con el que Fundación Repsol reforzó su compromiso de apoyo a la actividad de la OSG, vigente desde hace más de 20 años, a través del programa Son futuro. Entre los asistentes al concierto estuvieron los alcaldes de A Coruña y Arteixo, el delegado del Gobierno y el director de la refinería.