El nuevo hospital que la Xunta proyecta en la ciudad entraña más incógnitas que las relacionadas con su localización, a través de una ampliación de las actuales instalaciones o con nuevas construcciones en un emplazamiento distinto. Nada hay tampoco decidido sobre la financiación del complejo hospitalario anunciado a finales del año pasado por Alberto Núñez Feijóo, y el presidente autonómico no despeja dudas a este respecto. Preguntado ayer al término del Consello de Goberno por si la Xunta apostaría en A Coruña por un modelo público-privado similar al utilizado en la construcción del hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, evitó pronunciarse.

Esta fórmula se encuentra de entrada con el rechazo de los sindicatos con representación en el hospital coruñés, como pusieron de manifiesto esta semana en un debate organizado por Foro Cívico sobre la ampliación del complejo. Un plan de colaboración pública y privada como el promovido por la Xunta en Vigo supone la adjudicación de la obra a una empresa que la financia y ejecuta a cambio de la gestión de los servicios no sanitarios durante veinte años y un canon anual.

La presidenta de la Junta de Personal del Hospital de A Coruña, María Seixo, de la CIG, advirtió en el debate de que la financiación tiene que ser "pública en todas sus consecuencias" y rechazó que la Xunta emplee el modelo de Vigo. El secretario general de la Unión Comarcal de Comisiones Obreras en A Coruña, que estaba entre los asistentes, secundó esta postura y se preguntó si el Gobierno gallego esconde "intereses económicos ajenos a la propia asistencia médica".

Esta fórmula de financiación compartida supuso hace tres años el inicio de una investigación de la Comisión Europea a raíz de una denuncia de la Asociación Galega para a Defensa da Sanidade Pública contra la vulneración de la legislación europea en la adjudicación del hospital de Vigo a una concesionaria.

Feijóo, de momento, no ofrece explicaciones sobre el modelo por el que se financiaría el complejo hospitalario coruñés, como una inversión totalmente pública o en colaboración con sociedades privadas, y en la respuesta a la pregunta de ayer se refirió a que aun se debe resolver cómo ampliar el hospital y a que deberán comenzar las obras de otras edificaciones previstas en el plan director de las instalaciones antes de empezar incluso los trabajos de ampliación.

"El hospital de A Coruña precisa actuaciones urgentes que vamos a hacer con independencia del nuevo hospital que construiremos, que es una obra que puede durar seis, ocho o diez años", explicó el presidente de la Xunta.

El Gobierno gallego está a punto de adjudicar, añadió Feijóo, la consultoría que analizará cuál es el procedimiento idóneo para ampliar el hospital: con un complejo nuevo en otro lugar, para el que la Xunta llegó a apostar por las instalaciones de la fábrica de armas, donde la Universidad promueve por su parte un parque de innovación de empresas tecnológicas; o con la demolición de viejos edificios sanitarios y la construcción de otros nuevos junto a las edificaciones que están en mejor estado. El presidente gallego señaló a finales de 2018 que la decisión sobre la ampliación del hospital de A Coruña se resolvería en el primer semestre de este año.