Los títulos de Espacio Natural de Interés Local (ENIL) para las islas de San Pedro y para el entorno de la Torre de Hércules no llegan. Y el Concello se impacienta. Desde que se iniciaran los trámites de ambas declaraciones, en 2017, la Xunta ha solicitado a la Concejalía de Medio Ambiente diversos documentos y cambios en los planes de conservación de ambas zonas sin que se dé por finalizado el proceso. Por estos "atrasos", explican fuentes municipales, se ha solicitado, por escrito y por vía telefónica, una reunión con la directora xeral de Patrimonio Natural, Belén Docampo „que fue delegada provincial en A Coruña de la Xunta durante cuatro años„, pero, tras un mes, no ha obtenido respuesta.

En otoño de este año finaliza el plazo de la declaración provisional en el caso de las islas y desde el Concello temen que la demora pueda "poner en peligro" que el nombramiento sea definitivo. En enero de 2018 el Gobierno local envió el plan de conservación a la Xunta y en abril se comunicó verbalmente el visto bueno, aunque no sería hasta el pasado mes de enero que arrancó el trámite de exposición pública, que finalizó en febrero. El día 7 de ese mes, la Consellería de Medio Ambiente solicitó una copia del documento en castellano para su análisis por parte de la Demarcación de Costas. Según el departamento municipal, hace justo un mes que se remitió esta versión del informe sin que haya habido novedades.

El Gobierno local urge a la Xunta a agilizar la tramitación y reprocha que durante un año, entre enero de 2018 y febrero de este, no recibiera "ninguna comunicación oficial" por parte del Gobierno gallego. Fuentes municipales alertan de que en 2003 ya se comenzó este proceso pero las islas nunca llegaron a tener la declaración porque el por entonces Ejecutivo de Francisco Vázquez nunca elaboró el plan de conservación.

En el caso del entorno de la Torre de Hércules, la Xunta exigió, tras la aprobación en el pleno de la petición de solicitud como ENIL, más documentación de la aportada por el Concello. En junio de 2018 Medio Ambiente recibió un escrito en el que se suspendía el procedimiento para pedir informe a la Dirección Xeral de Territorio y Urbanismo y al servicio provincial de Conservación de la Naturaleza. Dos meses después, la Xunta también pide la documentación traducida a castellano, lo que suscita recelos en el Concello porque, alega, en el proceso de las islas no hubo tal requerimiento a estas alturas del proceso. Tras contestar la petición, se vuelve a requerir más documentación que, según la concejalía dirigida por María García ya está aportada „entre ella, el citado informe en castellano„ por lo que envía un escrito en febrero, dos días después de la petición, para que la Xunta aclare el procedimiento que tampoco ha tenido contestación por ahora.

Los títulos con los que pretenden contar ambos espacios buscan la conservación de su flora y la fauna, en algunos casos única, y el Concello defiende que supondrá una oportunidad de promoción educativa y científica y que se controlarán amenazas. Entre las medidas que plantea el plan de conservación municipal, está, en el caso del archipiélago formado por seis islas frente a O Portiño, la prohibición de atracar en su entorno barcos que no sean de pesca, que no se puedan trasladar allí semillas que puedan alterar las plantas autóctonas o que no puedan entrar animales de compañía.

La zona entre la playa de As Lapas y la cala de Adormideras cuenta con cinco hábitats „matorral, cantiles, urnas y cuevas marinas, bosque ripario y pastizales„ destacados por la Unión Europea como prioritarios para la conservación. Además de crear un Plan Municipal de Manejo y Conservación de este espacio, el Concello podría desarrollar iniciativas para favorecer el uso público de la zona de conseguirse la declaración.